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Ver el agobio marcado en el rostro de Jooheon hacía que el corazón de Changkyun se sintiera oprimido sin poder evitarlo. De alguna forma y en algún momento ellos habían compartido un tramo de su vida y sus almas se habían unido de una forma que era muy difícil de separar.

Sin poder soportarlo más miró hacia su pareja, quien inmediatamente entendió la silenciosa petición de abandonar el lugar para que ambos cambiaformas pudieran tener una charla como se debía, y así poder terminar con muchas de las cosas que venían arrastrando desde hace mucho.

— Jooheon... —le llamó colocando una mano en el hombro del tigre, que estaba sentado en el suelo, acurrucado a más no poder— No te sientas culpable por tomar una decisión que incluya tu felicidad. Todos tenemos derecho a intentar ser felices, y aunque no lo logremos, el esfuerzo vale la pena.

El mayor suspiró y miró a quien había sido su compañero por mucho tiempo.

— Que tú digas algo como eso, me hace sentir como un idiota inmaduro... —sonrió con tristeza— Se supone que yo soy el mayor, quien debería estar dando palabras sabias, no al contrario.

Changkyun sonrió levemente.

— Es porque siempre he sido más genial que tú. —alardeó en busca de molestar a Jooheon, según la costumbre de siempre.

— Tienes razón. —afirmó el tigre sin ánimos ni siquiera de seguirle el juego.

Al ver que la atmósfera se tornaba de nuevo en aquella sombría y triste, el menor se sentó al lado de Jooheon y suspiró.

— Honey, honey... —susurró— En serio, nadie va a culparte por buscar a Minhyuk. Además, el señor alcalde y yo vamos a encargarnos de buscar a los demás, no tienes que preocuparte. Juré que iba a ayudarte, y voy a hacerlo... —lo miró con seriedad— Ve y busca a tu familia, y si no... —Jooheon rápidamente bajó la mirada ante esa desgarradora posibilidad por lo que Changkyun decidió modificar sus palabras— Quiero decir, tienes que volver. Sin importar lo que pase allá, tienes que volver de vez en cuando para que no te olvides de mí.

El silencio reinó después de aquel comentario, y aunque estaba claro que Jooheon estaba todavía en una gran lucha interna acerca de a quien debía buscar primero, tomó una decisión sabiendo que no había forma de que saliera ileso de esa situación.

Si buscaba a los mayores primero, le reclamarían que aunque fue libre antes que todos, todavía no había buscado a Minhyuk quien era la niña de sus ojos. Y si buscaba primero a Minhyuk y por alguna milagrosa razón lo encontraba con vida, era de esperarse que se molestaría porque no buscó a los mayores primero para después volver.

Aunque, si era sincero, lo que más predominaba en su cabeza era el pensamiento de encontrar a Minhyuk. Ya sea encontrarlo vivo, o al menos el último rastro de su persona, en aquel lugar donde acarició su abultada pancita por última vez.

— Lo haré. —dijo decidido y con los ojos húmedos sin que lo notara.

Changkyun suspiró al escucharlo. Sabía que Jooheon todavía tenía un duro camino por delante, pero lo apoyaría en todo lo que pudiera sin duda.

— Entonces hay que hacerlo. —respondió apretando el hombro de su amigo con fuerza.

Jooheon asintió, pero inmediatamente lo miró un poco avergonzado.

— ¿Sabes cómo? —susurró con la mirada baja— porque yo no...

Afortunadamente Changkyun era una persona muy organizada que no escatimaba la sabiduría para actuar, por lo que inmediatamente trazó un plan bastante certero para poder ayudar a su amigo a volver al lugar del cual había sido sacado por la fuerza.

El menor conocía el recorrido y el lugar, pero nunca se quedó ahí por demasiado tiempo por lo que sólo pudo trazar un recorrido aproximado hasta el lugar que suponía que Jooheon debía de llegar. El mayor, por su parte, escuchó atentamente cada una de sus direcciones y aunque no era tan sabio como Changkyun, de alguna forma lograba entender todo lo que decía.

— Necesitamos que llegues en el menor tiempo posible por lo que usar un transporte humano no te servirá de mucho. —explicó— Necesitas emplear tu don, y así recorreras todo en la mitad del tiempo.

Jooheon se quedó pensativo un momento.

— Entiendo todo, pero... ¿Cómo podría hacerlo sin ser visto y atacado? —cuestionó con un poco de temor tan solo de recordar las cicatrices que se habían quedado marcadas en su cuerpo debido al maltrato— quiero decir...

El señor alcalde que en ese momento vino a ellos con un par de tazas de té, decidió responder a esa pregunta.

— En ese caso yo podría ser útil. —depositó las tazas en una mesa y las ofreció con una señal silenciosa— En realidad, Changkyun ya me había hablado del plan mucho antes de decírtelo, supongo que es una persona muy sabia a la cual le gusta observar el panorama desde todas las perspectivas, por lo que dedujo que querrías hacer esto.

Jooheon miró a Changkyun y él bajó la mirada avergonzado. No le gustaba recibir halagos y menos si venían de cualquiera de las otras dos personas presentes.

— ¿Cómo podrías ayudarme? —preguntó Jooheon tomando una taza de té y desviando la atención del sonrojado Changkyun.

Después de beber un sorbo, el señor alcalde sonrió casi emocionado.

— Creo que este chico no te lo ha dicho, pero realmente puedo ayudarte. Resulta que aunque tengo poder por ser el alcalde de este pueblo, mi familia tampoco ha sido pobre. —explicó— No es que fuera una familia adinerada como para que pueda colocar su apellido junto a los otros de la élite, pero tenemos un par de terrenos que podrían ser de utilidad si se aprovechan en el futuro. —Jooheon lo miró con curiosidad, esperando que continuara— Hay una propiedad en específico que se encuentra en un punto clave entre el pueblo y la naturaleza abierta. Si vas a esta propiedad nadie te molestará, y si la atraviesas podrás seguir la ruta que Changkyun te ha trazado. Así, evitarías las zonas de caza más vulnerables ya que toda esta heredad es un área protegida por mí, y todo lo que hay dentro y a los alrededores tiene que ver conmigo, así que nadie se atreve a molestarme. —sonrió hacia Jooheon— No puedo protegerte todo el camino hasta a casa, pero sí puedo ayudarte a salir del pueblo sano y salvo, aún en tu forma de tigre. —apretó su hombro comprensivamente— Lamento no poder ofrecer más.

El tigre miró a aquel hombre por varios segundos y pudo darse cuenta por qué Changkyun había decidido estar con él. Definitivamente era un buen hombre, ambos lo eran, y por eso formaban un gran equipo que no debía separarse.

— Esa ayuda es más que suficiente. —susurró en respuesta y con una sonrisa sincera.

Todo estaba decidido.

Lo único que faltaba era iniciar el viaje de regreso a casa y en busca de la felicidad, rogando al cielo que cuando llegara, pudiera encontrarse cara a cara con aquel rostro que tan sólo verlo le iluminaba el alma. Pero si Minhyuk no estaba más...

¿Habría otro motivo por
el cuál seguir adelante ?

¿Habría otro motivo porel cuál seguir adelante ?

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Need Of Freedom  [Monsta X] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora