L: 09

111 31 27
                                    

Al ver a Hyungwon bebiendo una taza de café caliente al lado de una chimenea mientras hablaba con el señor alcalde, mientras llevaba el abrigo puesto que le quedaba hermoso, el corazón de Wonho dolió todavía más. Tanto que no podía dejar de verlo, mientras pensaba en que no podía ser egoísta de pedirle llevar una vida como la suya, él no lo soportaría.

En ese momento una mano se posó sobre su hombro, y al girar la cabeza para ver a su dueño, se encontró con Changkyun, el chico del pasado de Jooheon.

—No tienes que preocuparte por él. —dijo sin mirarlo. —Si se queda con nosotros vamos a cuidarlo bien, y no dejaremos que nadie lo encuentre. Incluso si alguien lo encuentra podemos defenderlo bastante bien, ya que el señor alcalde tiene mucho poder político, económico y legal, y tomando en cuenta todo lo que el chico nos ha contado, hay más de un motivo para castigar a los culpables de su sufrimiento.

Wonho escuchó todo, pero no sirvió de nada porque esas palabras no lo estaban consolando.

¿Cómo podría confiarle la vida de Hyungwon a otros? Y más importante, ¿cómo podría dejarlo solo cuando es la única compañía que el delgado atesora y quiere cerca? Pero también tenía a Minhyuk. Necesitaba comprobar con sus propios ojos que su Minhyuk estaba vivo.

Tomando un fuerte respiro, se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la salida que Changkyun le había explicado que debía tomar, aprovechando la distracción de Hyungwon en su conversación.

—¿No te vas a despedir de él? —preguntó el preocupado Changkyun siguiéndolo de cerca, pero Wonho no contestó. —Oye, ¿qué crees que voy a decirle si me pregunta? —dijo molesto. —¿Que simplemente te fuiste sin decir nada?

Wonho se detuvo mirando al suelo.

—Dile que salí a cazar. —susurró. —Que es una costumbre, no una necesidad. Y si no vuelvo... —suspiró profundamente. —Sólo dile que probablemente morí alla afuera.

Changkyun se sorprendió de tan duras palabras, pero una luz roja se emitió en el lugar y antes de que pudiera hacer algo, un león había salido corriendo de su terreno.

—¡Oye! —gritó el molesto Changkyun intentando seguirlo, pero se retractó al darse cuenta que si ambos se iban podían crear un problema más grande así que volvió a su lugar original con la única opción de seguir el absurdo plan de Wonho.

El señor alcalde y Hyungwon salieron a ver qué ocurría cuando escucharon el grito de Changkyun, pero no pudieron ver nada más que a él viendo hacia un punto en específico más allá de la arboleda.

—¿Qué ocurre? —preguntó el señor alcalde. —¿Viste algo en el exterior? ¿Hay algún ladron?

El menor vio al pelinegro que parecía tener mucho frío aún, y suspiró.

—Wonho... Se fue de caza. —dijo bajando la mirada. —Le dije que teníamos comida pero dijo que era una costumbre suya. Demosle su tiempo.

Hyungwon lo miró fijamente y una lágrima silenciosa resbaló por su mejilla.

—Él... —dijo en un susurro con dificultad. —Él no va a volver, ¿verdad?

No hubo respuesta a su pregunta, así que simplemente sonrió, se limpió la lágrima con la elegancia que lo caracterizaba y se despidió para ir a la habitación que le habían asignado con anterioridad.

Changkyun no lo vio más en ese día, pero estaba seguro que Hyungwon lloró mucho después de eso, porque el cansancio era notorio en su cara conforme los días pasaban, así que lo único que se le ocurrió fue decirle a su pareja que le diera algunas tareas de administración pues él ya había notado que Hyungwon no sólo era muy inteligente sino que también tenía mucho conocimiento sobre política, leyes y administración económica.

Need Of Freedom  [Monsta X] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora