CAPÍTULO 23

1K 58 0
                                    

Break Your Heart - Taio Cruz

–¿Estás segura de que quieres que vaya contigo?–me pregunta Pearl.

–Completamente segura.– estoy ansiosa por ver la cara de Hayden cuando se entere de que el repartidor vendrá con nosotros. En realidad, hemos quedado directamente en la fiesta.

Pearl y yo estamos esperando a los chicos en la entrada de casa. Pearl me ha prestado la ropa que llevo puesta, ya que no tengo nada para la ocasión. Llevo una camiseta negra con transparencias que deja ver el sujetador. Esto no me convencía, pero al ponérmelo me acabó gustando. La parte de abajo son unos vaqueros negros ajustados y un poco rotos, que es lo único que es mío de lo que llevo puesto. Pearl sacó unos tacones que al ponérmelos e intentar caminar un poco casi me doy de bruces contra el suelo, así que los descarté, corriendo a por mis converse, pero Pearl me las apartó diciendo que el blanco iba a destacar mucho con lo que llevaba, así que me ha prestado las suyas que son negras y tienen plataforma.

Luego me ondeó un poco el pelo para que se me marcase más los rizos que tengo que, por cierto, solo aparecen cuando me ducho y si no me plancho el pelo, no desaparecen. Así que después de ondulármelo, me hizo una coleta con algunos mechones sueltos. Ella va vestida con un simple vestido negro ajustado y los tacones que me quería encasquetar a mí.

Se ha alisado el pelo y ya va perfecta. Esta vez decidí pasar un poco del maquillaje oscuro que Pearl me quería hacer, así que me puse rímel e iluminador.

Después de mil horas, los chicos deciden salir de casa y encontrarse con nosotras.

–¿Se puede saber porque habéis tardado tanto si vais, literalmente, como siempre?-me atrevo a decir.

–Es que había que hacer cola en el baño. Ya sabes, hay que salir con el depósito vacío–contesta Dereck.

Pearl y yo caminamos delante de los chicos mientras me cuenta lo divertida que será la fiesta. En varias ocasiones nos giramos para hablar con los chicos y siempre que miraba a Hayden veía que tenía su mirada fija en mi, no la apartaba, si que decidí ignorarle. Ahora y todo lo que queda de día.

Después de diez minutos, llegamos a la casa donde se celebra la fiesta. Hay gente fuera con sus bebidas en mano bailando, fumando o morreándose.

De momento, lo que he visto el las películas y leído en libros es verdad. Solo me falta confirmar si utilizan vasos de plástico de color rojo.

Entramos y un fuerte olor a... ¿plástico quemado? inunda mis fosas nasales.

–Tíos, ¿oléis lo mismo que yo?–se queja Danny.

Buscamos con la mirada algo en llamas sin decir nada, y manteniéndonos en el umbral de la puerta por si hay que salir corriendo.

Hasta que...

–No me jodas.–murmuro y los chicos me miran por lo que acabo de decir.–Creo que deberíais preocuparos más por el tío que está corriendo en calzoncillos con una bolsa de plástico ardiendo en la mano–digo apuntando al chico.

–No me jodas.–repiten los chicos a la vez. Pero Pearl no dice nada. Miro hacia dónde estaba Pearl hace un minuto. No hay rastro de ella.

–Chicos ¿dónde está Pearl?

Todos responden encogiéndose de hombros y se van a perseguir al chico en llamas. Todos menos Hayden, como no.

–Me puedo quedar contigo, si quieres.

–No, gracias. Estoy bien.–sonrío falsamente.

–Oye, no tienes porqué ser así.–dice desesperado.

Tal Vez NosotrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora