Amnesia || Magcon [✔️]

65 ~ Sospechas y teorías

Importante: ¡Lean nota al final!

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Abrí la boca levemente, preparada para preguntar sobre Eva, pero aterrada de la contestación que podría obtener.

Mi curiosidad por saber la verdad se vio eclipsada por mi temor y, finalmente, opté por no decir nada.

Sin embargo, a mi izquierda, Sebastian habló por primera vez.

–¿Ya les preguntaste cómo desapareciste?

Volteé para verlo, completamente pasmada por lo que me acababa de preguntar, en tan solo un susurro, y en francés.

Había estado tan enfocada en averiguar si todo lo que me habían dicho mis padres era cierto, que olvidé por completo una de las incógnitas que me habían estado carcomiendo por dentro desde hace meses.

¿Cómo y por qué desaparecí? ¿Qué fue lo que me pasó?

Regresé mi mirada a los chicos frente a mí, cuya atención se encontraba en mí y en Seba, confundidos pues no entendían el idioma.

El haber conocido a mis padres y escuchar todo lo que me dijeron, fue tan confuso que olvidé todo lo que originalmente quería saber luego de despertar en aquella playa.

Ahora, después de todo este tiempo, tenía la oportunidad de preguntar y, tal vez saber, por qué tenía amnesia.

¿Por qué no recordaba quién era? ¿Por qué estaba sola en esa playa?

–Les conté sobre cómo había despertado en una playa, sin recuerdos de quien era –comencé a decir. –Pero ustedes aún no me han dicho lo que pasó... ¿Qué pasó para que terminara allí?

Al terminar de formular mi pregunta, esperé a que alguno de ellos hablara y respondiera aquella interrogante que había sido tan constante en mi mente.

Todos me miraban en silencio y, durante un segundo, pensé que nadie sabía nada, lo que me aterró; sin embargo, Nash habló.

–No teníamos mucho tiempo libre para explorar la ciudad debido a la gira –comenzó a explicar levemente. –Así que, de vez en cuando nos escabullíamos fuera del hotel, en las noches, para salir y visitar algunos lugares. La mayoría de las veces ibas solas y regresabas luego de un par de horas –su voz comenzaba a escucharse más baja. –Una noche, aquella noche, todos regresábamos al hotel luego de haber cenado y subí contigo a tu habitación –se detuvo un momento y tragó saliva. –Dijiste que debías hacer algo, que tenías que salir otra vez, y que regresarías pronto... –su ceño se frunció. –Me quedé dormido, esperándote, pero nunca regresaste... esa fue la última vez que alguno de nosotros te vio.

Nash culminó de hablar y una vez más, reinó el silencio.

No sabía qué pensar de eso, excepto que tenía razón, ellos realmente no sabían lo que me había sucedido.

Había salido a solas una noche, en un país que no conocía, y nunca regresé. Cualquier cosa pudo haberme pasado esa noche, pero supongo que nunca lo sabré.

Juzgando por las expresiones de los demás, parecía ser la primera vez que escuchaban aquella anécdota. Me sentía culpable por haber desaparecido así, quería pedir perdón por toda la angustia que les había causado, pero sabía que no serviría de nada.

También me sorprendió el no sentir decepción ante la falta de respuestas. Tal vez ya me había acostumbrado a no saber nada. O tal vez se debía al hecho de que, en el fondo, sabía que descubrir lo que me había pasado ya no me resultaba tan importante como antes.

Todo aquello estaba en el pasado y no había forma de cambiarlo, ahora tenía una nueva vida en la que enfocarme. Lo único que me interesaba ahora, era descubrir qué cosas de mi pasado sí podía cambiar, para así ser una mejor persona.