Capitulo 37: El Apocalipsis Anunciado

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-¡¿Qué haces aquí Rei?!

-Es una larga historia... Pero es mejor contestarlas en orden.

-Hmm...

La verdad quiero que me expliquen todo lo que ha sucedido.

Luego de sentarnos en la mesa, Kaira fue la primera en hablar para explicar la situación.

-Vamos a comenzar con mi identidad. Yo soy Kaira Tokitabi y eh sido enviada por la diosa Cronoa.

-¿Esa diosa sigue viva? Imposible, ha estado varios milenios muerta.

-Se me apareció en mis sueños... Además, me prestó sus poderes, así que es imposible que fuera una impostora.

Lo que dice tiene sentido. Nadie ha tenido el poder de manipular el tiempo desde que murió Cronoa, además los cronolitos son simples piedras inútiles... Espera...

-¿Puedes manipular el tiempo?

-Si... Pero tengo límites para usarlo en su máximo poder, una de ellas es la cantidad de energía que requiere, así que no puedo usarla inconscientemente...

-Ya veo... -dije mientras asiento mi cabeza.

-Cronoa me dijo mediante sueños que un ángel llamado Sariel está planeando destruir a todos los dioses que no estén en su facción. Ella planea usar a los humanos para llevarlos a una nueva era en la que sean la raza dominante de este universo...

-¿Y cómo lo sabe? -Pregunto Rend que estaba interesado en ese dato.

-Cronoa tiene la capacidad de ver posibles futuros, pero en todos siempre terminaban igual: Sariel terminaba conquistando el universo.

Esto suena bastante como a un villano promedio que busca poder... Debe haber algo oculto... Cómo los humanos...
Después de pensar en eso, decidí preguntarle a Kaira.

-¿Qué tienen los humanos en especial para que intente dominarlos?

-Esa es la parte más sospechosa de Sariel... Ella ni siquiera lo sabe, solo se lo dijo un compañero suyo, un tal Gabriel.

Entonces confía ciegamente en alguien... Parece ser que su personalidad consiste en lanzarse a la acción sin ningún plan.

-Aun así, en un posible futuro logró descubrir el arma definitiva: un poderoso rayo de energía que es capaz de destruir cualquier cosa que se interponga... Incluso a dioses. Con aquella arma no importa que hagamos, simplemente es imposible de derrotar. Gracias a eso logro conquistar a todos los dioses y humanos.

-¿Arma definitiva? Eso quiere decir que esos cañones y tanques...

-No... Esas no se comparan al verdadero, solo son imitaciones hechas con un material en especial.

Ya veo... Eso explica porque los demonios estaban minando en este planeta.

-Yo logré cambiar aquel futuro. Me uni a ella y le di la idea.

-¡¿Qué?! Osea que tú...

-Si Terra, estoy trabajando con Sariel... Pero no había otra forma, si las cosas seguían así ella descubriría el elemento principal para crear la verdadera arma definitiva.

Esto es un poco chocante. Pensar que ella fue la responsable de destruir mi pueblo donde viví me hizo perder un poco la calma... Espera ¿Por qué perdí la calma? ¿No deberían importarme esos humanos después de asesinar como más de la tercera parte de la población mundial?.

Algo raro dentro de mi ha cambiado, no es solo el cuerpo, sino hasta mis pensamientos más profundos han sentido este sentimiento desagradable...

Mientras estaba absorta en mis pensamientos, Rend empieza a hablar.

-¿Y cuál era ese elemento que daría lugar al arma definitiva?

-Ese es... Un anillo.

¿Eh?¿Un anillo?

-Sariel es estúpida, así que nunca pudo analizar su anillo que colgaba en su cuello debido a que es un recuerdo muy preciado para ella... Pero allí estaba la clave de todo, en realidad ese maldito anillo tiene algo que no es normal. Según Cronoa ese elemento se le llama la "piedra filosofal".

-¿Piedra filosofal?¿Qué es eso? -pregunte.

-Es una cosa que permite manipular los límites de todo.

-Limites...

Dije esa palabra sin pensar...

Cuando pienso en límites, me es imposible relacionarlo con aquella señora peliroja que conocí cuando estaba en el límite entre la vida y la muerte. ¿Tendrá algo que ver con aquella cosa?.

-Aquel objeto es demasiado peligroso. Si bien en un inicio Sariel lo uso para su arma definitiva, posteriormente logro comprender su verdadero poder y gracias a ello logro algo peor que solo conquistar el universo... Lo destruyó...

-¡¿Lo destruyó?!

No puedo creerlo, eso es estúpido, ya que el propio universo tiene un límite llamado "Solve et Coagula" que en palabras simples cualquier intento de destruirlo provocaría la inevitable creación del mismo...

Espera... Límite... Manipulación de los límites...

...

Esto es malo.

-Por eso no tuve otra opción. Forme una alianza para distraer a Sariel y construyera un arma diferente al que originalmente tenía pensado, porque no había otro posible futuro dónde ella no conociera el poder del anillo que posee.

-Entiendo...

Realmente me duele admitirlo... Pero el destruir a mi pueblo era un pequeño precio a pagar para que no existiera esa posibilidad.

-Es por eso que te necesito Terra.

-¿Eh? ¿Me necesitas?

-Si, ya que los dioses no pueden enfrentar a las armas de Sariel. Tu solo has visto tanques, pero esa tipa tiene una gran cantidad de armas, muchas de ellas capaces de anular la fuerza divina... Pero tu eres una humana, esos juguetes no tienen ningún efecto en ti.

-Yo...

No se que decir...

-No te voy a presionar, pero ten en cuenta que tu familia celestial está en peligro.

-Hermana... Creo que es momento que hable contigo...

La Humanidad de una CelestialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora