Estoy de vacaciones en mi hogar después de varios meses estudiando en la iglesia sobre mis poderes de tierra.
En lo que respecta a mi bendición, soy conocida como la joven prodigio. Ningún niño de mi generación me supera en poder.
Normalmente cualquier usuario de tierra carece de la fuerza suficiente para mover veinte metros cuadrados de manera perfecta, sin embargo yo puedo mover hasta cincuenta metros cuadrados de tierra con total facilidad.
El sacerdote y los adultos del pueblo tienen la esperanza de que algún día sea la defensora del pueblo.
Al principio creía que convertirme en la defensora de este pueblo era una molestia; pero a medida que pasaba el tiempo me fue agradando la idea.
Solo tengo que defender este lugar de cualquier amenaza. Todas mis necesidades estarían cubiertas y, si en el futuro llegó a portar la espada Hisou, ningún demonio tendría el coraje de enfrentarse conmigo.
Es por esa misma razón que estoy entrenando mi cuerpo para ser fuerte.
Pero no por esa razón voy a privar a mi cuerpo de un buen descanso en la cama de mi casa, después de todo soy una señorita consentida por naturaleza. No quiero quedar como una marimacha.
—Terra ¿Por qué no vas a visitar a tu amiga Kaira?.
De repente me habló mi mamá que se encontraba en la puerta de mi cuarto.
—Lamentablemente no sé dónde vive.
Me dijo hace tiempo que vivía en las montañas, pero jamás eh visto su casa.
—Ya veo...
Mi mamá se retira de mi cuarto con una tristeza grabada en su cara.
La verdad sería buena idea ir a visitarla. Ella me a apoyado por bastante tiempo, sobre todo en lo que a comida se refiere.
Tal vez no lo parezca, ¡pero en serio tiene un don para crear comida!
Por ejemplo: un día le hablé sobre las papas fritas, un alimento que solía consumir en el cielo. Al día siguiente lo había preparado para mí. O aquel día que le describí un Hot Cake; pasaron como dos días para que ella me trajera un Hot Cake para desayunar.
Aún así, el único alimento que ella no ha podido crear para mí ha sido el helado. Bueno, creo que no puedo esperar milagros de ella, después de todo es una humana.
Recordando todo lo bueno que ha hecho Kaira por mi, decidí regalarle algo que a ella realmente le guste.
Con eso en mente, me decidí a buscar su casa en el bosque.
Actualmente poseo 14 años, así que ante la sociedad poseo la edad suficiente para entrar a las montañas. Primero empeze con la famosa montaña Izumo dónde yo y Rend fuimos juntos a escalar. Sin embargo no logré ver la casa.
Así que procedí a usar mi bendición de tierra para agilizar la búsqueda. Cómo tengo bastante experiencia con mis poderes, puedo sentir cualquier construcción en la tierra. La primera que sentí era el santuario a Susanoo que visité hace 4 años. Podía sentir sus cimientos.
Lamentablemente no sentí ninguna construcción cerca de mi. La montaña es realmente grande.
Como se estaba poniendo de noche, regresé a mi hogar.
Cuando lo piensas bien, uno pensaría que sería más fácil buscar a Kaira en el pueblo, pero ese no era mi propósito.
Tengo que darle eso.
Pasaron los días, pero nunca encontré su casa. Ni siquiera a Kaira logré ver, ultimadamente no la eh visto. Sin embargo no me rendí.
Finalmente, luego de una larga búsqueda, logré localizar una pequeña construcción de madera en las montañas.
Era una pequeña choza de madera.
Ya estaba poniéndose el sol, así que decidí ir directo a la choza y saludar.
—Hola.
De repente la puerta se abre.
—¿Terra?
Era Kaira. Podía distinguir su cara en cualquier lugar.
—Si, esa misma. ¿Qué sucedió? Han pasado semanas desde la última vez que te eh visto en el pueblo.
—Eh tenido que atender algunos asuntos. Sin embargo, hubieras esperado a que termine mi trabajo para que pueda darte mi dirección. ¿Por qué siempre tomas la decisión más difícil?.
Ella tenía razón, pero tenía mis motivos. Mientras ella termino de hablar, procedí a agarrar un objeto que llevaba en el bolsillo.
—Tienes razón, pero quería regalarte esto a cualquier costó.
—Eso... ¡Eso es!
—Si, es nuestra reliquia familiar. La prueba de que eres parte de nuestra familia. ¡La placa de los Tokitabi!
Era una placa que se coloca en la puerta de las casas. Para nuestros parientes, simboliza que eres parte de nuestra familia.
Sabía que a ella le encantaría, ya que me platicó que es huérfana y no tiene un apellido.
Un día, cuando la invité a mi hogar, estaba observando esa placa en la puerta de nuestra casa con mucho interés, y por eso mi madre le prático sobre ello. De tan solo verla sentía como la tristeza de Kaira por ser huérfana me inundaba.
—Ahora eres parte de nuestra familia, ¡así que puedes llamarte Kaira Tokitabi! Que tal si lo colocas de una...
De repente me detengo, eso es porque veo a Terra llorando.
—¡¿Ehh?! ¡Estás llorando! Perdona, no quería ofenderte ni nada por el estilo.
—No... No es eso, lloro de felicidad. Gracias.
Veo a Kaira con una sonrisa tan hermosa como el arcoiris...
Ah... Entonces ¿Lo más valioso para una huérfana son los lazos familiares? Nunca me detuve a pensar en ello. En todos mis 100 años de vida en el cielo, siento que es la primera vez que siento la felicidad de una persona tan intensa como la de Kaira.
—¿Quieres entrar? Te puedo preparar cualquier cosa para cenar. Si quieres, también puedes quedarte a dormir en mi casa. Aunque está un poco pequeña...
—¡No te preocupes! Mientras sea tu casa, yo estaré contenta de tu hospitalidad.
—¡Entonces eres bienvenida!
Ese día fue cuando conocí la felicidad de ayudar a otros.
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La Humanidad de una Celestial
FantasiTenshi Yurehime es la hija rebelde y malcriada del líder del clan de los Celestiales, deidades protectoras de los humanos que se encargan de luchar contra los demonios y dioses que quieren acabar con la humanidad. Ella no logra comprender porque su...