Capítulo 3: Enemies, Strangers, Lovers, And Friends

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Esa noche, en el Gran Comedor, Harry miró a su alrededor para ver quién se había quedado. Había más estudiantes que de costumbre, pero aún no eran muchos, y las largas mesas de las casas habían sido sustituidas por otras cortas con espacio para doce estudiantes en cada una. Ninguna estaba casi llena. En la mesa de Gryffindor estaban sentados Harry, una chica de séptimo año -Linda Talbot- y un chico de segundo año -Davey McDoughal-. En Hufflepuff había dos estudiantes de tercer año que apenas parecían conocidos, pero en Ravenclaw había seis personas, todas de cuarto año o más, que parecían sentirse fríamente cómodas entre ellas. Malfoy, Crabbe y Goyle, con un chico de primer o segundo año que parecía asustado, se sentaban en la mesa de Slytherin.

Harry observó varias veces a cada grupo. Si su corresponsal se había quedado, estaba en algún lugar de la sala. Harry comenzó a evaluar a los alumnos restantes, eliminando a los que no podían haber escrito las palabras en la cámara.

A Crabbe y Goyle los descartó por ser demasiado estúpidos, y a los de primer y segundo año por ser demasiado jóvenes. Ningún Hufflepuff, juzgó Harry, tendría el desprecio de su corresponsal por las reglas. Estaba seguro de que Linda, la restante Gryffindor, no se pasearía por el colegio de noche. Eso dejaba a todos los alumnos de Ravenclaw -(dos chicas y cuatro chicos)- y a Draco Malfoy. Harry decidió que no quería pensar en esa última posibilidad, ahora mismo. Tal vez debería investigar a los alumnos de Ravenclaw.

Sin embargo, mientras estaba en la cama, en el dormitorio de los chicos de sexto año, que por lo demás estaba desierto, sus pensamientos volvieron a Malfoy. El padre de Malfoy era ciertamente un terror, y sus amigos -(al menos, Crabbe y Goyle)- eran idiotas, así que esos hechos encajaban, pero la actitud parecía equivocada. Harry nunca había oído a Malfoy hablar mal de su padre, ni de ningún otro miembro de su familia. De hecho, solía sacar a relucir a su padre para intimidar a los demás... Harry frunció el ceño.  Eso encaja, en realidad. Pero su familia... solía burlarse de mí por no tener familia... no me lo imagino diciendo que no quiere la suya.

De repente, Harry recordó a Malfoy, durante su primer año, diciendo en voz alta y sin sinceridad lo mucho que sentía por la gente que no podía ir a casa por Navidad, porque nadie los quería. Por un momento, Harry pensó en Ron y Hermione, disfrutando del alegre caos de la Madriguera, y una ola de autocompasión lo invadió.

Le dijiste a Ron que estarías bien, se reprendió a sí mismo.  No es su culpa que hayas mentido.

Se obligó a volver a pensar en Malfoy. Sí, eso era lo que había dicho Malfoy en su primer año, pero luego, el segundo año, había estado aquí, él mismo. Harry, Ron y Hermione habían asumido que era porque era el Heredero de Slytherin, pero se habían equivocado. ¿Por qué había estado Malfoy en el colegio? ¿Estaba allí para vigilar la trama o simplemente su familia no lo quería ese año?.

A la noche siguiente, no hubo nuevos mensajes en la Cámara. Harry, con una mezcla de fastidio y alivio, consideró la posibilidad de que su corresponsal se hubiera ido a casa después de todo, aunque cinco días atrás había escrito "... me quedo". Harry se preguntó si debía volver a sellar la Cámara. Bajo su mensaje del último día de exámenes, añadió:

¿Eres un Parsel?

Al final del día siguiente, Harry eliminó a regañadientes a una de las chicas de Ravenclaw como alguien que no iría a ningún sitio tan sucio como el túnel que llevaba a la cámara de los secretos, y a todos los chicos de Ravenclaw como simplemente demasiado poco imaginativos para encontrar algo tan lejos de la biblioteca. Esto, observó con aprensión, dejaba a la otra chica de Ravenclaw y a Malfoy.

El veintitrés de diciembre, se acostó en la cama, considerando esto.

Durante las vacaciones, había planeado intentar reunirse con su corresponsal. Parecía claro que sólo tenía que violar la regla de los días alternos y tenía muchas posibilidades de sorprender al otro. Pero si era Malfoy, ¿querría hacerlo?.

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