SNAKES AND LIONS

Capítulo 13: Trust and Trials

Harry había llegado muy tarde, y se despertó sintiéndose desconectado y malhumorado. Mientras se arrastraba fuera de la cama, recordó haber escrito una disculpa a Draco en el Liber Geminus. Aterrado de que fuera horrible, fue directamente a su bolso y sacó el libro. Se alegró de que sus compañeros de habitación ya se hubieran ido a desayunar, y se sintió aún más aliviado al encontrar la disculpa razonable, aunque escrita de forma desordenada. Se puso la túnica escolar justo a tiempo para llegar al desayuno antes de que terminara. Ron, que salía del Gran Comedor cuando Harry llegó, lo miró fijamente al pasar. Harry fingió no darse cuenta.

Neville seguía en la mesa.

-¡Será mejor que cojas algo antes de que desaparezca, Harry!-, chilló. Harry asintió. Cogió un panecillo, lo partió y puso rápidamente dos salchichas dentro. Sólo tuvo tiempo de limpiarse los dedos en una servilleta limpia antes de que la servilleta y los platos desaparecieran.

Neville estaba de pie, moviéndose inquieto sobre las puntas de los pies. -¿Transfiguración?-.

Harry asintió, con la boca demasiado llena para hablar. Subieron juntos las escaleras. A mitad de camino, Neville preguntó: -Harry, perdona, pero... ¿Siguen siendo amigos Ron y tú?-.

Harry se encogió de hombros y tragó saliva. No se atrevía a decir que no. -Espero que vuelva-, dijo en voz baja, deteniéndose en el rellano. -No lo sé-.

-No parece que lo esté intentando mucho-.

-Y no lo está intentando en absoluto-.

Harry dio un gran bocado al panecillo y a la salchicha, por lo que no se podía esperar que dijera nada más.

-Cerdo-, susurró alguien al pasar, y Harry miró justo a tiempo para vislumbrar la sonrisa de Malfoy. El propio Draco parecía haber renunciado al desayuno para arreglarse el pelo y la túnica. Tenía un aspecto impecable. Harry comenzó a subir las escaleras de nuevo. Al menos Draco no parecía estar enfadado con él.

-Siempre he pensado que debe ser maravilloso-, dijo Neville. -Tú, Ron y Hermione. Cuando son amigos, quiero decir-.

Harry consiguió tragar. Le dolía la garganta, ligeramente, pero la comida bajó.

-Lo fue-, dijo. -Tal vez vuelva a serlo, cuando se hayan superado... no quiero decir "superado", en realidad-, corrigió apresuradamente. -Quiero decir cuando no estén obsesionados-.

Se metió lo último de la comida en la boca antes de entrar en el aula, y él y Neville se sentaron al fondo de la clase.

Harry decidió esforzarse más con Ron. Esa noche, intentó invitar a Ron a jugar al ajedrez.

-Estoy ocupado-, dijo Ron en pocas palabras. Pasó una página de su texto de Pociones. Encogiéndose de hombros, Harry subió al dormitorio. Intentó leer sus deberes de Herbología, pero no dejaba de preguntarse si Draco había aceptado realmente su disculpa. En retrospectiva, le pareció bastante gracioso que un insulto de una sola palabra hubiera sido tan alegre.

Suspirando, Harry recogió sus deberes, sacó su capa y su mapa y se dirigió a la Cámara de los Secretos.

Draco estaba allí, frunciendo el ceño ante un trozo de pergamino.

-Hola-, dijo Harry.

-Hola-. Draco sonrió. -Me preguntaba si aparecerías-.

-No estabas en Transfiguración-.

Draco se encogió de hombros. -Tuve un pequeño accidente en Cuidado de Criaturas Mágicas, y necesitaba tomarme la tarde libre-.

-Claro-, respondió Harry con incredulidad.