Máscaras.

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Katherine parpadeó varias veces al notar que su hermana menor le levantó la voz.

—No se por que demonios les importa tanto... Está afuera. Y tiene prohibida la entrada...

Apolo sintió que, literalmente, le daría un Tic. Se alejó de ellos dando zancadas y se apresuró a salir buscándola con la mirada. No le costó mucho trabajo averiguar dónde estaba, siguió el sonido de la risa de T/n hasta verla con los padres de Valentina.

El Sr. Piece asintió y después ladeó ligeramente la cabeza.

—¿Qué haces aquí...? Creímos que no volveríamos a saber de los Salvatore después de...

—Lo de mis padres. Seguí trabajando en la empresa. Viene con mi novio... —señaló el interior del castillo.

Tras esas palabras, el rubio sintió como sus latidos se aceleraban. No podía creer que se hubiera referido a él como su novio.

—Será un placer hacer negocios con ustedes... — le extendió la mano.

Apolo se acercó a ellos con una sonrisa de oreja a oreja.

—Será un honor trabajar con la hija de los Salvatore...—dijo el Sr. Pirce.

—Envíale un saludo de nuestra parte a Alexander... Apuesto a que ya es todo un hombre...

T/n sonrió forzadamente tras las palabras de la Sra. Pirce. Estaba más que claro que no era de su conocimiento que Alexander Salvatore había muerto.

—Señor y Señora Pirce... —T/n suspiró aliviada al escucharlo, la tomó de la cintura y la pegó a su cuerpo.— Veo que conocen a T/n...

—¡Por supuesto, idéntica a su padre...! —Dijo el Sr. Pirce, haciendo sonreír a T/n.

La Sra. Pirce sonrió con curiosidad sujetando el brazo de su esposo.

—¿Cuando dijiste que venías con tu novio, te referías al Príncipe Apolo?

La sonrisa en el rostro del aludido solamente se ensanchó más al escuchar la respuesta afirmativa de T/n.

—¿Les parece si entramos? —señaló el Castillo.

Los señores Pirce aceptaron encantados caminando a lado de T/n y Apolo.

Apolo frunció el entrecejo cuando T/n se detuvo abruptamente en la entrada, dejando solos a los Señores Pirce.

—¿Que pasa?

—Tengo prohibida la entrada. —dijo burlándose descaradamente de Katherine y sus órdenes.

Apolo encaró una ceja que gritaba a todo el mundo "Yo-mando-aquí".

—Según... ¿Quien?

—Katherine Pirce...—sonrió divertida.

—¿La conoces?

T/n asistió con la cabeza.

—Mi familia ha trabajado con la suya. No la reconocí hasta que ví a sus padres. No sabía que tenía una hermana. Eso sí me sorprendió.

—Bueno... — besó su cabeza —Estas son mis tierras, "Dominios Gallagher". Una Pirce no puede venir a imponer algo...

—Un macho Alfa... —dijo dándole unas palmaditas en el pecho.

Apolo la miró divertido.

Jonh, el guardia de seguridad, impidió que T/n entrara extendiendo la mano.

—Disculpe Señor Gallagher. La Señorita Salvatore no puede pasar.

—Es mi novia y claro que va a pasar. Ella puede hacer lo que le plazca. Quedan bajo sus deseos y órdenes. Es una orden, Jonathan...

Protegiendo a la corona.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora