Capítulo 19: ¿He arrancado la bandera de la muerte?

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Carter sintió que su hijo se estaba convirtiendo en un hombre.

Sentado en el asiento central de la mesa del comedor, recordó todas las agradables sorpresas que encontró hoy.

Se suponía que sería solo una reunión privada entre él y el Príncipe Kane sobre los asuntos de la Orden de los Caballeros Sagrados. Sin embargo, dio la casualidad de que la hija del príncipe Kane había estado entrenando recientemente en la Orden de los Caballeros Sagrados y, como padre cariñoso, el príncipe Kane tomó la decisión inmediata de concederle a su hija un breve descanso. La trajo aquí con él, provocando así este encuentro coincidente.

Carter nunca había imaginado que esta coincidencia provocaría un desarrollo inesperado pero agradable.

Nora Xeclyde era un nombre familiar en el círculo de nobles de la Teocracia de Saint Mesit. Una línea de sangre pura y una excelente educación significaron que tenía un gran potencial en ella. Ella todavía era joven, pero todos sabían que era mejor no subestimar a esta joven princesa.

Si realmente tuviera que señalar un defecto con Nora Xeclyde, sería su carácter demasiado perfecto. Su impecabilidad dificultaba que cualquier otra persona, además de los miembros de la familia, se acercara. Incluso Kane, como su padre, se había lamentado en varias ocasiones de que su hija parecía cada vez más distante, como si se estuviera poniendo una máscara de su perfección para ocultar su verdadero yo.

Pero, por primera vez, esta alta flor de la nobleza, independiente y elevada, tomó la iniciativa de unir los brazos a un compañero, incluso mostrando renuencia a separarse de él. Carter nunca hubiera creído que esto fuera posible si no lo hubiera visto con sus propios ojos.

¡Y lo que era aún más increíble era que esta persona era su propio hijo!

Oh gran Sia, ¿Qué diablos está pasando aquí?

Carter se sintió profundamente perplejo por este asunto. Miró detenidamente a su hijo, evaluando al niño de pies a cabeza después de que Kane se fue, pero no pudo discernir nada. Como no pudo determinar qué había provocado tal reacción de Nora, al final, solo pudo atribuirlo a la reciente diligencia de Roel.

De hecho, desde la anterior conversación de corazón a corazón que tuvieron, el niño había experimentado grandes cambios. Incluso cuando recibió a los invitados antes, su porte fue acertado, manteniendo un frente educado, pero no de manera antinatural.

¡Aun así, Roel tendría que esforzarse mucho para estar del lado bueno de esa joven princesa!

¡Eyy, será un camino difícil por delante, hijo mío!

El pequeño tirano no quiere encontrarse con un mal final - Parte 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora