- Altagracia deberías dormir en casa hija – niega – Por qué no vas y descansas un poquito?
- No tengo sueño, olvide mis gotas para los ojos – murmura – Trato de que mis ojos se lubriquen solos
- Si como no – camina a ella – Te traje del pastel de ayer, sé que te gustó mucho
- Gracias mamá – se endereza abriendo los ojos – Te volviste a escapar? – dice al ver a Mónica
- No, está vez yo fui por ella – hace especio en su mesa – Hija que desorden tienes aquí
- Ah bueno, no quiero escándalos de tu madre como la otra vez – se levanta – Mamá no es desorden, deja que yo me encargue que luego se me pierden las cosas – pide
- Que bonito! – dice Mónica antes de acercarse a uno de los maniquíes
- Ese es el de Mónica? – indaga Amanda
- No, el de Mónica llevará más tiempo por eso es de los últimos, todavía no descubro como hacer que tenga más libertad en las piernas – ordena sus papeles – Ese es de una chica que se llama... Coral creo
- Es realmente precioso – sonríe yendo a verlo con Mónica – Qué colores tendrá el tuyo?
- Rosa, coral, lila pastel y un raro tono de azul – responde Altagracia – Ya tengo las telas aquí, tiene el diseño de un corsé pero como necesita moverse mucho le puse barillas flexibles sólo para que se parezca a uno – les señala el maniquí – Es ese de allá, nomas no lo toquen que todavía la estructura está... algo inestable
- Este es el boceto – se lo enseña Mónica – Va a quedar super bonito – dice emocionada
- Parece vestido de pasarela – analiza el boceto
- Gracias – se escucha su risa – Es que tengo un plan para ellos después
- Cómo que un plan? – se gira
- Son diseños exclusivos y está es la primera vez que hago trajes para bailarinas, van a salir en una revista obviamente – se desliza hasta su máquina de coser – Ya lo hable con la institutriz de la academia, ella hablará con los padres, necesito que las bailarinas modelen ya que sólo ellas se los pueden poner
- Saldré en una revista! – chilla emocionada
- Y si los padres no dan permiso? – cruza los brazos
- Claro que lo harán, es promoción para la academia y para sus hijos, salir en una revista les abre puertas para muchas cosas – da de hombros – No creo que nadie rechace la oportunidad pero si llega a pasar pues me tocará exhibir los vestidos en maniquíes
- Ay, yo quiero aparecer en una revista – se queja
- Tú ya apareciste en más de una desde que todo salió a la luz – le recuerda Amanda
- Bueno pero no eran buenas fotos – ríe – Van a maquillarme bien bonito, habrá un fondo espectacular
- Locación! – corrige Altagracia – Son trajes de alta costura, cualquier cosita va a un estudio de fotos pero estos trajes ni pensar! Aplastare a la competencia
- Cuando habla así da miedo – niega Amanda
- A mi me parece divertido – ríe
- A que hora te desocupas corazón? – indaga
- Mamá, no me dices así a menos que quieras lograr algo de mí – detiene su máquina
- Sabes que no me gusta depender de ti – advierte
