- Se mueve un montón! – ríe Mau con la cabeza apoyada sobre su vientre
- Te dije! – dice Mónica que se encontraba igual que él
- Pobre niña, no la dejan descansar – ríe el maquillador de Altagracia mientras le arreglaba los ojos
- Llevan así desde antes de que llegarás – susurra – El plan era dormir un poco mientras me maquillabas
- Me parece que quedó bien atrás ese plan – sonríe – Sube un poco la carita mi amor
- Bastante atrás – obedece – Al menos el jardín quedó espectacular
- Nunca vi un baby shower tan bonito como este – la observa – Y acá entre nos, una embarazada bien hermosa, cuál es tu secreto?
- No tengo idea – admite – Y eso que no duermo lo suficiente, imagina lo que sería si lo hiciera – bromea
- Tremenda diosa – ríe – La verdad es que si te note cansada, andas trabajando mucho?
- No la verdad, simplemente no consigo dormir por las noches, ya tengo todo bien organizado para lo de la inauguración – comenta – Descansaré toda la semana o bueno eso voy a tratar de hacer, me toca ser niñera – señala a ambos niños
- Ay pero la tienes fácil – le hace el delineado – Dejas que molesten a la personita que tienes dentro y listo
- Cierto – ríe
Mónica venía seguido a estar con Altagracia pues ya por fin se habían mudado a la capital, así que como no estaba en clases pasaba a quedarse con su madre biológica mientras su madre adoptiva trabajaba, claro que tampoco era todo el tiempo pues Mónica estaba en otras actividades, seguía con el ballet aunque ahora era temporada de descanso, por lo que pasó a estudiar en bellas artes, quería mejor su técnica al dibujar, además de comenzar a esculpir. Aquello le tomaba bastante tiempo así que no andaba molestando a Altagracia que lidiaba con las últimas semanas de su embarazo.
Además estuvo algo estresada por los preparativos del baby shower, se había apegado a los colores rosa, lila, blanco y tonos más claros de ellos, lo que quería lograr era que se sintieran en un cuento de hadas por lo que apartaron un gran cargamento de rosas con esos colores, así como otras plantitas, se colocó una gran carpa para evitar el sol además de conseguir un lugar fresco ya que ese día había una brisa fresca, del techo colgaron las rosas junto con las típicas sombrillas de papel para que no quedará tan vacío, dos mesas largas fueron colocadas cerca de la otra, el centro de mesa eran las mismas rosas que en el techo sólo que con diferentes tonos, todas colocadas en filas.