Capítulo 23

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El trio de oro no había abordado el tren de Hogwarts por lo que supuso que estarían en la búsqueda de horrocruxes.

Pero no eran los únicos buscando.

Altair había conseguido entrar en la sala de menesteres donde encontró muchas cosas lista para su plan.

Cuatro giratiempos. Un mapa del merodeador. Y un huevo de dragón era de las cosas que había agarrado.

Tubo que buscar durante tres días pero lo encontró.

Aunque el huevo de dragón simplemente era por un capricho que tenía pero lo había logrado.

En su plan b necesitará dinero por lo que había agarrado muchas cosas que vendería y otras que se quedaría.

Tampoco era como si le importara la vida de los demás.

*

De vez en cuando Altair era llamada por Voldemort por lo que ella tenía que ir por la chimenea a la casa de los Malfoy.

Ya se había acostumbrado a eso pero se llevo una sorpresa al ver que tenía que torturar a alguien.

Nunca lo había hecho. No sabía que hacer. A ella se le daba bien ser insufrible no torturar.

-Burbuja- le dijo Altair a Hermione completamente sorprendida, aunque ambas estaban igual.

-¿La conoces?- le pregunta Bella.

Pudo ver como Hermione cerraba los ojos como si esperase que la delatara- Sí, es una amiga de la escuela. Se graduó el año pasado, pensaba que la volvería a ver dentro de un año más o menos.

La última frase era una indirecta para Hermione.

Altair solo espero a que Bella empezara con la torturar. Sabía que si Hermione estaba allí lo acompañarían los otros dos.

Por algo los tres Gryffindor eran conocidos como el trio problema.

Tres por uno siempre pensaba Altair una vez supo el significado.

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