Estoy corriendo como si mi vida dependiera de ello, y es que en cierto punto lo hace. Mis pulmones arden y siento mis piernas fallar, voy a morir.
Devon corre detrás de mí, él es mucho más rápido y ágil por lo que en poco segundos me encuentro acorralada entre un árbol y sus brazos.
¿Que como termine en un bosque oscuro con un posible psicópata acorralándome?
Tres horas antes.
Antes de continuar con el juego guardo la ropa interior de Devon en el pequeño bolsillo izquierdo que tiene el vestido, escuchó a una chica decir que sienta el aroma de la prenda y de no ser porque hay una multitud de personas viéndome quizás lo hubiera hecho.
Penny tira la pelota y Connor la golpea con suavidad, luego Devon la lanza en mi dirección y esta sale disparada hacia quien sabe donde.
Punto para ellos.
—Bien, bambi—dice la última palabra burlándose—Tenía pensado ponértelo fácil pero luego del ridículo reto que elegiste para mi...
—Dile que se quite la ropa—grita alguien y la mirada de Devon se vuelve afilada.
—Eso no tiene gracia.—responde —es un reto muy fácil.
Trago en seco, sea lo que sea que esté pensando para mi no será bueno, no después de lo que hice.
Busco entre la multitud alguna cara conocida y veo a Victoria observando directamente al Cuervo que ha decidido acabar conmigo, ella lo observó con tanta intensidad, con tanto detalle que no puedo evitar pensar en que es lo que ocurre con ellos.
—Ven aquí.—ordena Devon con autoridad interrumpiendo por completo mis pensamientos.
—¿Vas a decir el reto o continuarás haciéndote el interesante?
—Pero que impacientes estamos. —responde con diversión.
Muerdo la parte interior de mi mejilla con nerviosismo mientras camino en su dirección, una vez estoy cerca de él puedo notar como una pequeña sonrisa victoriosa aparece en sus labios.
Aproximadamente unos cuatro pasos nos separan, desde esta distancia puedo ver con claridad sus ojos grises, puedo ver la lluvia de pecas que cae sobre su piel pálida, también puedo ver algunos tatuajes asomarse por el cuello de la musculosa blanca que lleva puesta. Bajo la vista por unos segundos y siento mi garganta seca al notar que aún tiene el pantalón desabrochado.
—Arrodillate.
—Creí que a mi me tocaba ser la chica de los fetiches. —digo alzando ambas cejas con superioridad.
—Arrodíllate.—insiste —Tu reto es arrodillarte y dejar que pase mi cinturón por tu cuello.
Toda superioridad, todo sarcasmo desapareció de mi rostro en cuanto oí sus palabras.
— Esto comienza a ponerse bueno— Grita alguien y yo no puedo evitar ponerme nerviosa.
—¿Qué clase de reto es ese?—digo mientras intento ignorar a las personas de alrededor.
—¿Qué clase de reto es decirle a alguien que se quite los calzoncillos y te los de?—responde con otra pregunta.
Me encojo de hombros, ¿Donde me estoy metiendo? Bajo la vista hasta su entrepierna y entonces me arrodillo delante de él, una mueca de desagrado ocupa mi rostro y no es precisamente por que no me guste lo que tengo enfrente si no que el drama es que tenemos a media universidad mirándonos.
Mi corazón late con fuerza dentro de mi pecho, levantó la cabeza y me encuentro con los ojos grises de Devon mirándome con intensidad, con maldad y deseo. No me siento avergonzada, me siento eufórica, me siento con ganas de demostrarle que le voy a devolver el golpe.
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Reina el amor duele (COMPLETA✔️)
Teen Fictionojos grises. pelo negro azabache. brazos con más tatuajes de los que puedes contar y una mirada escalofriantemente seductora. Sonaba perfecto, pero como el Jardín del Edén, alguien rompe las reglas y lo desmorona todo. No sabía que al entrar en la u...