Reencuentro en el vértice

Te buscare

El viaje de Chicago a Nueva York parecía una eternidad para Candy, la joven estaba tan ilusionada que contaba los minutos y segundos faltantes para ver a Terry y tambien pensaba en voz alta lo que le diria cuando lo viera. Como no había ningún rastro del castaño, lo buscó por toda la estación y terminó saludando a un sujeto nada agraciado que tenia la misma espalda que su Romeo británico sin contar con el hecho de que un hombre misterioso tomó su mano para llevarla a un lugar mas despejado en la estación.

-No has cambiado nada, Candy - La rubia se llevó la sorpresa de su vida al descubrir que el hombre misterioso era Terry, el chico que tanto estuvo esperando.

Ambos estaban tan felices de volverse a ver que solo veían las caras, hasta que fue el propio Terry quien rompió con todas sus inseguridades dándole un fuerte abrazo a su pecosa.

Después de ese momento emotivo, los chicos se fueron a un restaurante, allí ordenaron un café y jugo de naranja respectivamente, así mismo platicaron de sus viejas aventuras estudiantiles, de sus respectivas carreras, y claro, de cuanto habían crecido ...

-Estas más varonil y creo que estás más alto. sostuvo Candy.

-Puede ser, en cambio tu

-Yo que? -preguntó jugando con la cañita de su vaso.

-Bueno... tu no ... - una pequeña gota de jugo fue a parar cerca de los ojos del castaño - Vamos Candy- La regañó con suavidad es que estas alturas de la vida, Terry esperaba que su novia actuara conforme a su edad.

-Lo siento, no fue mi intención.- se disculpó y de inmediato le entregó una servilleta.

-Ya lo dije, no has cambiado nada -expresó con tranquilidad secándose- No te imagino como una futura enfermera

-Futura no, diplomada -corrigió haciendo muecas iniciando una ronda de felicitaciones y agradecimientos.

-¡Es verdad, ya eres enfermera! ¡Felicitaciones pecosa!

-Gracias Terry. Yo también quería felicitarte por hacer el personaje de Romeo

-Gracias Candy.

Un silencio incomodo hizo acto de presencia en medio de su conversación, hasta que ..

-Deseaba mucho verte - admitió Candy rompiendo el hielo.

-Yo también, soñaba contigo, con volverte a ver y no separarnos más -confesó Terry con sinceridad iniciando una platica larga y tendida

-Terry ¿por que llegaste tarde a buscarme? saludé a ese hombre por equivocación. cuestionó recordando ese momento tan embarazoso.

-Me di cuenta Candy, y me sorprendí, creí que estabas mal de la vista.-Declaró el actor entre risas.

-Tenia tu misma espalda -continuó diciendo no esperaba que vinieras vestido así. - efectivamente, no esperaba ese recibimiento tan inusual y es que con Terry Grandchester uno nunca está seguro de lo que pasará.

Le explicó que que tenía que usar un disfraz para que nadie lo reconozca porque su imagen estaba por toda la cuidad, obviamente ella estaba feliz y orgullosa de tener a un actor famoso como novio pero en ese entonces algo no le cuadraba...

-Es que no es muy romántico -dijo con sinceridad -En realidad yo esperaba un reencuentro más romántico. -Ninguno de los dos contaron con el hecho de que los otros clientes escuchaban toda su charla del inicio hasta el final.

-Es verdad, no es nada romántico. -al igual que la ojiverde, Terry también estaba incomodo. -Te llevaré a tu hotel -propuso poniéndose de pie, ella hizo lo mismo y como la curiosidad mató al gato,no pudo evitar el deseo de ir al departamento de su novio para ver como vivía, una proposición que el aparentemente no esperaba.