032: Dino

3.5K 287 7
                                    

Las cosas no podían ir peor.

Dino corria con toda velocidad entre los pasillos observando en cada rincón de estos mismos intentando encontrar una cabecita con pelo negro y dos colitas con rulos. Pero el lugar era tan concurrido que le resultaba un poco dificil guiarse al posible lugar donde se escondía aquella gatita.

La gente lo miraba extraño, como si estuviera escapando de alguien o como si realmente fuera un loco desquiciado... y es que siendo sinceros si lo era, si estaba loco por una razón en específico, pero no estaba escapando de nadie. Aún no.

Dino estaba como loco desesperado intentando encontrar a la pequeña hija de su hyung, era tan solo una niña de cinco años llena de energía y con ganas de darle malas pasadas a sus mayores, tan pequeña pero era tan bromista y traviesa, un polo opuesto a su padre, la bolita de amor se parecía más a su madre en cuanto actitud pero físicamente tenía todo el rostro de su progenitor. Pese a su edad la chiquilla se había soltado de su mano hechandose a correr a quien sabe dónde. Planeando cosas macabras.

Poniéndose en contexto; Dino y Seokmin habían decidido llevar a la pequeña Jinnie con ellos al área de la carne mientras que su padre iba al área del pan, junto con otros de los mayores, que estaba del otro lado del súper. WonWoo les había pedido que cuidarán bien de su pequeña adoración  pero en un tonto descuido el torbellino se fué corriendo causando pánico en ambos chicos, no tanto por lo que fuera a hacerles WonWoo, si no porque la mujer de WonWoo le había dejado a este mismo  a la niña porque tenía algunos compromisos. Entonces la cadena se desataría, WonWoo se molestaría con ellos y su pareja se molestaría con WonWoo porque se descuido dejando que dos testarudos descuidaran a su hija.

Sería un lío así que Dino y Seokmin se habían separado para buscar al regalito de su hyung.

Por esa razón Dino corria como un loco, porque llevaba más de cinco minutos buscando a su sobrinita.

—¡Jinnie! —Gritó el chico en el pasillo de los cereales. Tal vez estaría ahí. Pero no hubo respuesta. —No, no estás aquí...

Sin más el chico se fue continuando con su búsqueda, estaba nervioso y temeroso, no sabía que podía pasar, podrían secuestrar a Jinnie por su tonto descuido o incluso cosas peores, podrían pasar muchas cosas para nada buenas si no se apresuraba a encontrar a la pequeña. Y el súper era muy grande, extremadamente grande así que ese era un punto menos y un punto más para su posible ejecutación. Dino saco su celular y marcó el número de Seokmin, ese hyung también estaba involucrado así que tenía que estar buscando a la niña tanto como él.

—¡Hyung! ¿Hay algún rastro de Jinnie? —Dijo en cuanto atendieron la llamada.

—¡No la encuentro Dino! —Gritó Seokmin, se escuchaba nervioso. El aludido suspiró comenzando a correr otra vez.

—¿Dónde estás?

—¡En el área de juguetes! ¡Creí que podría estar por aquí pero me equivoqué! Dino ¿Qué hacemos? —Demonios. ¿Qué hacer? No lo sabía, los nervios no lo dejaban pensar con claridad. —¿Llamamos a WonWoo?

—¡¿Estás loco Seokmin hyung?! ¡Eso sería cavar nuestra propia tumba! —Era cavar su propia tumba junto con la de WonWoo para esperar a que llegue la madre de Jinnie para que los entierre.

—¡Tienes razón! ¿¡Entonces qué hago!?

—¡Sigue buscando y si la encuentras me avisas!

—¡Afirmativo!

Ah. ¿Qué iba a hacer? Dino corto la llamada sin detenerse, no existía el cansancio para él, no tenía límites.

Todo estaba llendo mal, absolutamente todo estaba llendo de la peor manera.

𝘼𝙏𝙏𝘼𝐂𝐂𝐀: 𝙎𝙀𝙑𝘌𝘕𝙏𝙀𝘌𝘕 𝘐𝘔𝘈𝙂𝙄𝘕𝘈𝘚 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora