𝘼𝙏𝙏𝘼𝐂𝐂𝐀: 𝙎𝙀𝙑𝘌𝘕𝙏𝙀𝘌𝘕 𝘐𝘔𝘈𝙂𝙄𝘕𝘈𝘚

010: Minghao

Hoy tu escuela los había llevado a una escursión a un museo de arte la cual también era visitada por otras escuelas de la zona.

Tú estabas sola mirando una pintura que te resultaba bastante linda. No traías contigo la cámara por lo que fuiste en busca de tu profesor para que te haga entrega de tus propiedades.

No tardaste ni más de cinco minutos cuando ya ibas de vuelta a la pintura para sacarle una foto, pero para tu desgracia ya había otro chico observando.

Tenía el pelo gris y tenía uniforme de otra escuela por lo que con certeza asumiste que no era alguno de tus compañeros.

Te acercaste lentamente observando detalladamente la espalda de aquel chico, en cuanto lo tuviste a tan solo unos metros visualizaste que tenía una cámara con la cual estaba tomando fotos de aquella partitura.

No era que fueras metiche simplemente quisiste observar como tomaba la foto y realmente se veía hermosa la imagen que se enfocaba en su cámara.

Dijiste un corto "Woa" por lo que el chico se giró a tu dirección logrando ponerte nerviosa.

—Lo siento yo no estaba viendo tus imágenes tan hermosas que tomaste en tu cámara... digo, que yo no estaba...

Te callaste al caer en cuenta de lo que estabas diciendo. Hiciste una reverencia intentando olvidar lo sucedido.

—Yo también quiero tomar una fotografía... Si me permites.

Te colocaste frente a la pintura con la mirada del chico aún fijada en ti. Decidiste ignorarlo y colocaste la cámara frente a ti para tomar la foto.

Cuando estabas por tomarla la voz del desconocido te hizo reaccionar dejando aquel acto atrás.

—Se ve muy mal, no la tomes.

Giraste a mirarlo desconcertada.

—¿Perdón?

—Prestame.  —El chico te quito la cámara de las manos y él mismo tomó la foto.  —La que tú estabas por tomar salía borrosa... mira está.

Te extendió de vuelta el objeto y observaste la cámara encontrándote con quizás la imagen más hermosa que habías visto en tu vida. Una sonrisa de satisfacción salió de tus labios.

—Gracias, se ve hermosa. Se ve que eres bueno en esto de la fotografía.  —Lo miraste y esté asintió.

—Estoy estudiando artes para hacer mis propias pinturas y tomarles fotos para compartirlas con la gente... Es por eso que también estoy intentando  aprender a que las imágenes no se vean borrosas. —Sonreiste apenada.

—Bueno yo debo irme, suerte con tus fotografías.

Estabas por irte pero el brazo del chico te impidió retirarte.

—¿Cómo te llamas? Yo soy Minghao.

Guardaste silencio observando sus ojos bajo los lentes.

—Si claro, yo me llamó Hyejin.

Él sonrió ampliamente para después entrelazar sus brazos. Lo miraste más que confundida.

—Ire contigo para ayudarte a tomar tus fotos, Hyejin.

Te quedaste sin habla pero solo asentiste para comenzar a ser guiada por el chico.

Después de eso digamos que se hicieron amigos y de una cosa paso a la otra.

Ahora ambos son artistas y varias de sus pinturas están en museos dónde la misma historia se repite con otros jóvenes.

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Mi hermoso Brayan... Tu barrio te respalda cariño