A los 10 minutos contados se escucha que tocan a la puerta del cuarto, ambos sabíamos de quién se trataba por lo que Harry a toda prisa va hacia ella tomando el picaporte casi arrancandolo de la madera, por supuesto llegando a tropezar varias veces con todo lo que tenía en frente.
Por mi parte me encontraba en mi NUEVA cama, después de veinte largos años por fin puedo tener un colchón suave, almohadas y sabanas.
No hace falta mencionar que en la Isla todo era más que basura, ni hablar de el Templo de los Hunos, allí ni siquiera teníamos camas, todos dormíamos en el suelo para mejorar la postura, en cierta forma funcionó.
Me encuentro feliz, la única vez que estuve así de cómodo en una cama fue en dos ocasiones, cuando era apenas un niño de cinco años y solía dormir en una cama tan suave como esta junto con mi madre, y...la segunda fue por supuesto cuando pasé la noche junto a Ev.
Mis pensamientos jamás habían sido tan positivos, pero me distraje cuando noté que Garfio aún estaba quieto como una estatua, ni siquiera podía recitar una palabra, sólo tartamudeaba.
Ian: —¡HEY! Déjala entrar idiota ¿Que sucede contigo?—.
Al ver que no respondía me levanté de mala gana, había interrumpido mi comodidad por completo, simplemente fuí hasta donde estaba abriendo la puerta por completo.
Ian: —Te dije que la dejes entr...—.
En ese momento supe el porqué se había paralizado, la dulce y tierna Jane que usaba vestidos color pastel ya no estaba...en lugar de eso se encontraba una ruda y hasta fácilmente podría decir que una casi villana en frente de nosotros.
Llevaba puesto unos jeans ajustados que hacía juego con una camiseta manga larga bastante escotada, ambos de color negro haciendo juego y confundiendose con su oscuro cabello el cual traía suelto con unas ondas en él, dejando a la perfección que el azúl de sus ojos fueran los protagonistas, resaltaban como gemas.
Ella jugaba con los puños de su camiseta estirando la tela de sus mangas con nerviosismo, claramente por nuestras estúpidas reacciones.
Jane: —Sabía que era demasiado, saben, mejor iré a cambiarme...—. Tomé su mano justo a tiempo antes de que saliera huyendo.
Ian: —¿Qué, estás bromeando? ¡LUCES INCREÍBLE! Es más, entra, tengo algo para tÍ—.
Harry: —Estás...preciosa—. Susurró en un suspiro. —...mi tesoro—.
Cerré su boca ya que estaba a punto de dejar caer su baba, sin más tomé la mano de Jane para acercarla y dejarla entrar en la habitación.
Al estar dentro fui hasta mi cama y tomé mi chaqueta negra para poder dársela, tal vez parezca ridículo...pero nunca antes se la había dejado tocar a nadie, es demasiado importante para mi y mucho menos se la habría dado jamás a ninguna persona.
Pero Jane me hizo darme cuenta de demasiadas cosas, incluso me ayudó con el tema de Evie, sin ella posiblemente me habría ido de Auradon sin haberle dicho lo que sentía y no me encontraría donde estoy ahora, este sería mi regalo para darle las gracias.
Pasé por detrás de Jane y le coloqué la chaqueta dedicándole una sonrisa.
Ian: —Ahora sí, eres toda una villana—.
De inmediato sonrió mirándose en el espejo sorprendida, no creía que era ella la que estaba ahí parada.
Harry: —¡¡¡HEY!!!...a mi jamás me dejaste acercarme a esa cosa, hasta golpeaste a Gil una vez cuando quiso probarsela—. Con celos miraba a Jane cruzándose de brazos, ella al escuchar su acusación se volteó a verme para quitársela con desespero.
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𝑀𝑌 𝐸𝑉𝐼𝐿 𝑄𝑈𝐸𝐸𝑁 | Evie Grimhilde© [ +21 ] (EDITANDO)
Fanfic| Es difícil dejar el odio y el rencor de lado cuando tus mejores amigos se van olvidándose por completo de ti, y peor aún, descubres que la persona quien creías que era el amor de tu vida ahora se encuentra en brazos de un Rey |. Esta historia se c...