CHAPTER XXIX: Sensitivity

1.2K 46 1
                                    

La noche fue lenta, despertaba una y otra vez casi sin haber podido dormir, mi mente divagaba pensando en todo lo que había sucedido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La noche fue lenta, despertaba una y otra vez casi sin haber podido dormir, mi mente divagaba pensando en todo lo que había sucedido.

Intentaba unir todos los puntos tratando de averiguar la razón de todo, pero siempre terminaba en un mismo resultado, ellos querían que volviera a casa.

No voy a mentir, una parte de mí quiere volver, poder sentir el aire de esas montañas al igual que oír la bella lluvia cuando caía sobre las tejas y las bestias de piedra en la cresta...volver a ver a mis hermanos.

Seguramente en esta instancia ya muchos de ellos debieron haberse reunido después de que el ejército atacara el Templo, más que seguro siguieron su entrenamiento y a estas alturas debieron de haberme superado en entrenamiento en todas las formas posibles.

Eso es algo que odio, no haber podido terminar mi formación en el Clan.

Sé que pude haber sido el mejor si tan sólo hubiera seguido en ese lugar, extraño a mis hermanos, en especial a uno, si tan sólo él estuviera aquí no tengo dudas de que amaría este lugar.

Su sueño siempre fue irse de ese Templo, el mío era quedarme, él murió en ese lugar y yo estoy aquí viviendo la que podría haber sido su vida.

La herida de su partida estaba volviendo a abrirse y dolía muchísimo, tanto así que mi garganta comenzó a doler formando un gran nudo en ella, suspiré tratando de evitarlo...pero una lágrima comenzó a deslizarse por mi mejilla.

Simplemente cerré mis ojos pasando mis manos limpiando las lágrimas, no podía evitar sollozar, pero todos esos pensamientos de querer volver e incluso de Akira se esfumaron cuando ella se dió la vuelta, aún dormida se abrazó a mi torso.

De inmediato formé una sonrisa admirando cada parte de ella, era simplemente perfecta.

Yo no era así, ni siquiera al estar con Mal llegué a querer renunciar a todo, incluso hasta mi propia vida para salvar la suya.

Evie podría pedirme que asesine a todo Auradon y lo haría sin dudarlo, lo haría por ella, incluso saltar de un acantilado.

Fue en ese momento en el que supe que era el amor de mi vida, el verla aferrada a mí de esa manera entendí que ella estaba depositando su confianza en mí, al igual que confía en dejar a Dizzy conmigo sin preocuparse por que algo malo vaya a pasarle.

No quiero perder nada de esto, pero es justo lo que el Clan hará si me niego a volver con ellos, aún no sé bien lo que haré pero si de algo estoy completamente seguro es que no habrá una próxima visita, no dejaré que se acerquen a ellas por nada del mundo.

Unos minutos pasaron y el reloj de Evie comenzó a sonar, me acerqué para apagarlo por ella, pero en ese momento despertó abriendo poco a poco sus ojos formando la sonrisa más hermosa que haya visto.

Se estiraba en su lugar tratando de mirarme y una muy pequeña risa logró escaparse de sus labios.

Evie: —¿Cómo es que despiertas y te ves así de increíble?—. Formuló acercándose para acomodar su cuerpo encima del mío ocultando su rostro en mi cuello.

𝑀𝑌 𝐸𝑉𝐼𝐿 𝑄𝑈𝐸𝐸𝑁 | Evie Grimhilde© [ +21 ] (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora