Capítulo XXVII

791 72 8
                                    

***************

Elliot pensó en esa noche y supo que no volvería a pasar...

Por lo menos no ahora.

***************

Las horas habían pasado, tranquilas, sin mucha conversación entre los dos, apenas y algunos intercambios para el desayuno que recibieron en el avión.

No había una razón en especial para el poco contacto verbal y visual. Cuando Olivia despertó de su siesta estaba completamente avergonzada por haber terminado en el hombro de Elliot y no quería que las cosas se mal entendieran. Ella había aceptado la situación y lo último en su cabeza era Elliot y buscar tener algo con él. Por muy lindo que sonara su historia, ella no creía que tuvieran un final feliz, si es que existían.

Unos minutos antes de bajar, la azafata les entregó unos sobres color negro a los dos.

Se miraron algo perdidos y abrieron el sobre cada uno.

"Bienvenida a San Francisco, señorita Wilson. Un honor para nosotros que esté aquí. Junto con éste sobre se le entrega la tarjeta de su habitación en el Four Seasons de la cuidad. Que tenga buen día y que disfrute de la estadía."

El sobre de Elliot no era muy diferente al de ella, solo un cambio de género obvio. Cada uno tenía habitaciones distintas pero seguidas una de otra.

Y Olivia luego recordó que su nombre de encubierta era Emma Wilson.

El de Elliot, Sebastian Wilson.

Esposos...

— ¿Se supone que debo actuar desde ahora?— Le pregunto a Elliot bajando del avión.
El sol de San Francisco los recibía.
Ella vio la sonrisa en el rostro de Elliot y supo que él había regresado a casa.

— Sí, ya no somos policías o personas normales. Somos los malos y obviamente... narcisistas, así que espero que actúes bien, compañera—. Levanto la mano para que las juntaran empezando con el papel, regalándole una gran sonrisa.

— Ay, Sebastian. Pareces primerizo —. Lo miró con una pena fingida y rieron.

Acercándose a recoger las maletas, Elliot reconoció a un amigo.

— ¡Andrés!

— Elliot, que sorpresa.

— Por favor, mentir no es lo tuyo — volteo para ver a Olivia acercándose a ellos con las maletas—. Te presento a mi compañera, Olivia.

— Un gusto.

— Igualmente.— respondió Andrés.

Era hora de dejar los juegos y empezar a trabajar.

— Señorita y Señor Wilson, soy Andrés García y seré su guardia durante su estadía.

— Es lindo tener a alguien, ¿No, cariño?— dijo un poco despectiva volteando a ver a Elliot.

— Algo es algo—. Se conformó Sebastian.

El actuar se justificaba, con la excusa de que Andrés tenía un micrófono con enlace directo a la mafia, que seguramente ya estaban escuchando.

— Acompañenme, los embarcaré en su auto. Permítame — le dijo a Emma tomando el equipaje.

— Gracias.

Sebastián y Emma, estaban tomados del brazo mirando a distintos lugares por si notaban algo raro.

El contacto no entorpecia ni ponía nervioso a ninguno de los dos. Tenian claro que era trabajo.

Sebastian detuvo a Andrés para que él mismo pudiese abrirle la puerta a Emma.

Emma agradeció y entró en el auto. Andrés espero que Sebastián diera la señal para que pueda conducir. Después de dársela. Emma disfrutó, con una sonrisa impregnada en su rostro, de las calles y el sol que había. Sentía adrenalina de solo imaginar todo lo que podría hacer. Empujó su cuerpo al respaldar del asiento mirando por la ventana sin dejar de sonreír.

Sebastian disfrutó el viaje con tan solo ver la sonrisa en la cara de su esposa.
Hacia ya un buen tiempo que no la veía.

Manuel le besó la mano a Emma para saludarla, cosa que no le gustó mucho a Sebastian.

¿Manuel? Él está al mando de todo por aquí en San Francisco.

Hace unos minutos había llegado a una casa grande, como si fueras a un retiro con todas las comodidades.
Habían salido de la cuidad, estaban en las afueras, unos 30 minutos máximo, calculando.
Llegaron a un estacionamiento con puerta directa a la casa donde Manuel los recibiría.

Sebastian y Manuel se tomaron de la mano para saludarse. Luego Manuel ordenó que Andrés se llevara el auto.

M: Espero hayan recibido mis cartas. Pedí específicamente que se las dieran antes de bajar del avión.

E(mma): Así fue. Muy linda letra por cierto.

M: Tendré que agradecerle a Kendall.

Emma y Sebastian se miraron. Ya tenían otro nombre.

S(ebastian): ¿Y dónde estamos?

M: Esa información no la pueden saber pero seguimos en San Francisco, disfruten de la estadía. Pronto llegará su pedido.

Aparte de ser esposos, ellos también eran parte del negocio. Oyeron que Manuel tenía lindas chicas e hicieron esta reunión para poder comprarle una.

No continuaron preguntando. Manuel pidió que lo siguieran. Sebastian tomó de la cintura a Emma y caminaron juntos por un estrecho pasadizo para entrar en la cocina de esa gran casa.

Ellos no iban a quedarse ahí lo que afectaba el plan y tendrían que solucionarlo, tenían una semana para cerrar el caso.

E: Es hermosa la casa, Manuel.

M: Lo sé. A veces siento que es hora de remodelar.

E: Bueno si lo haces, no dudes en llamarme, me gustaría presentarte a algunas diseñadores. Claro, si gustas.

M: Claro que lo haré. Muchas gracias, madame.

Emma sonrió tierna en forma de un de nada para Manuel. Luego voltio el rostro para ver a su esposo algo molesto por la química que Manuel y ella tenían. Le dio un beso en el cuello para que se tranquilizará, justo a tiempo para cuando Manuel volteó.

M: De verdad se quieren.

E: ¿Lo dudabas?

M: No muchos pueden mantener un matrimonio en este negocio.

S: No somos como el resto—. La miró y le dio una sonrisa cálida.

Los dos por muy tranquilos que parecieran con el acercamiento se preguntaban una cosa:

¿Trabajo o amor?

***************

Ustedes que piensan: Emma y Sebastián o Olivia y Elliot ¿O ya se combinaron los papeles?
Un capítulo algo corto y con poco bensler pero tienen que trabajar🙈😣
INFINITAS GRACIAS POR LEER ❤

~Soph <3

𝐍𝐨 𝐓𝐞 𝐕𝐚𝐲𝐚𝐬 (𝐐𝐮é𝐝𝐚𝐭𝐞 𝐀 𝐌𝐢 𝐋𝐚𝐝𝐨)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora