𝐍𝐨 𝐓𝐞 𝐕𝐚𝐲𝐚𝐬 (𝐐𝐮é𝐝𝐚𝐭𝐞 𝐀 𝐌𝐢 𝐋𝐚𝐝𝐨)

Capítulo XXXIV

ADVERTENCIA:
En este capítulo se describen tocamientos no deseados, lo considero explícito porque si no estás acostumbrado o no puedes leer ese tipo de cosas, puede ser malo, recomiendo que te saltes el verso en negrita ❤️

***************

... cuando empezó a salir con la persona que amaba y pensaba que ella también, lo traiciona de esa manera tan... tan... despreciable.

(...)

***************

O: Patrick, ¿Qué, qué haces aquí? - miró incómoda a todos lados por el salón, esperaba que nadie estuviese mirando la escena que estaba protagonizando. Sentía sus mejillas enrojecidas y un calor abrumador empezó a causarle un sudor frío y empezó a sentir pánico. Luego buscó con la mirada a Elliot que lo único que hacía era lanzarle una mirada matadora a Patrick a pesar de no conocerlo o saber algo de él. Según ella.

Elliot tenía las cejas fruncidas, los puños presionados y un lenguaje corporal bastante malo, incómodo a vista de otros e irritable. Simplemente no podía -o no quería- ocultar su molestia frente a la presencia del humano llamado Patrick frente a él.

Olivia creyó que lo más apto era presentarlos y terminar con el silencio incómodo que no soportaba. Patrick había ignorado su última pregunta y Olivia no entendía muy bien porque hasta que recordó que le había preguntado y se golpeó la cabeza mentalmente por haber hecho una pregunta tan estúpida y obvia.

O: Patrick, él es... - ¿Quién era?, ¿Patrick que tiene qué ver con todo esto?, ¿Porqué estaba ahí?

En ese momento, notó que su pregunta anterior no era tan estúpida y esperaba no fuera obvia. Porr la cabeza de Olivia pasaron muchas -demaciadas- cosas, ideas, pensamientos, soluciones, mentiras, verdades y terminaba con la cabeza en blanco.

Poniendo en contexto la situación, esta era una fiesta para amigos de Manuel, que se reducía a violadores, mafiosos, secuestradores, narcotraficantes y muchos más de todas las clases, literalmente, había para elegir a quien matar primero. Pero Patrick no era nada de eso, según recordaba, Olivia, él era abogado, por eso su relación fue tan conflictiva y algo deprimente, pero el punto es, que Patrick era abogado, no tenía nada que hacer en una fiesta que incluía esa otra clase de personas que anteriormente había mencionado en su cabeza. Su cabeza se lleno de cabos sueltos y preguntas sin respuesta.

¿Qué tenía que ver Patrick con Manuel, o los amigos de Manuel? ¿Estará de encubierto? No, espera. Olivia, él no es policía. -se auto-reclamó - Si Patrick me sigue llamando Olivia sabrán que no soy Emma y todo se irá a la mismísima mierda. Mejor le digo que Elliot es Sebastian, ¿pero como arreglo lo mío? - y su debate de preguntas fue interrumpido por Elliot queriendo terminar la presentación que ella había comenzado.

E: Me llamó El-- -Olivia le pisó el pie y continuó por él.

O: Disculpa. Creo que fue el alcohol que se me está subiendo a la cabeza. Él es mi esposo, Sebastián -. Elliot le dio una mirada de confusión a Olivia y entendió que -por la mirada que ella le daba- sólo debía seguirle el juego hasta que pudieran conversar.

E: Sí, un gusto. Soy Sebastián. Patrick, ¿verdad? - le dio la mano. Se mordió la mejilla para tratar de liberar su enojo dentro de él y no en Patrick.

P: Sí, el mismo. No sabía que te habías casado. La última vez que nos vimos--

O: La última vez que nos vimos fue hace mucho y si me disculpa hay algunos temas que mi esposo y yo debemos conversar... En el baño, a solas - con los comentarios tan fuera de lugar de Patrick, a Olivia ya empezaba a irritarle hasta su presencia y lo único que se le pasó por la cabeza para que los dejara en paz, fue incinuar algo erótico entre ella y su esposo para que fuera lo suficientemente real e incómodo para Patrick. Gracias a Dios, así fue.