Capítulo 23

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-¿Entonces a que? -pregunte confundida.

-Ay amiga, eres tan lenta -dijo Mitch.

-¿Sabes? Aveces no te entiendo -dije.

-Milla, no te hagas tu también lo quieres -dijo ella.

-Pues claro, es como mi hermano, igual que Brad y Nick -dije. No se a dónde quiere llegar.

-Detén el auto, yo bajo aquí -dijo Ari malhumorado.

-Todavía falta una cuadra para llegar a tu casa -dijo Bart.

-No quiero que mis padres me vean con esta -dijo Ari refiriéndose a Mitch- maldita Johnson me las pagaras.

-Ya, ya, ya -dijo Mitch- ni que fuera tan malo.

-Podar el pasto del jardín de mis tíos si es malo, además me tienen que llevar mis padres a su casa para cerciorarse de que lo haga bien -dijo Ari molesto- todo por tu maldita culpa -le reprocho a Mitch.

-Yo no te dije que le bailarás al chico travesti -dijo mi amiga aguantando la risa- y no seas exagerado, ni que fuera la mansión de tu primo punk.

-No fue por en baile, fue por que estaba tomado y si, sí es la casa de mi primo punk, la que parece estadio de fútbol -dijo Ari fulminando con la mirada a Mitch- mala amiga.

-Ya perdón y saca tu trasero de mi auto ahora mismo -dijo Mitch haciendo una señal con su mano.

-Adiós, nos vemos mañana -se despidió el rubio y salió del auto.

-En serio eres mala eh -dijo Bart refiriéndose a Mitch.

-¿Tu también? -dijo esta- me siento demasiado culpable y tu me lo sigues echando en cara.

-Ay por favor -dije riendo- todos sabemos que no te sientes culpable de nada.

-Tienes razón, ni un poco.

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-¡Al fin llegas! -dijo Jack molesto- ¿Dónde estabas?

-Con su novio cara de gay -dijo Trent.

-Con mis amigos ¿y? -pregunte.

-¿Cómo que "y"? -pregunto Jack molesto- no te puedes escapar así, estabas con Trent además ya sabes que no puedes salir sola.

-¿Y Trent si se puede ir con una italiana y dejarme sola? -dije y Trent me miro molesto.

-¿Tu hiciste eso? -le pregunto Jack- ¿dejaste sola a mi hermana?

-Si, lo hice -dijo Trent- y no la deje sola, estaba con un hombre al lado, dormido claro pero no se quedo sola.

-Lo ves -dije sonriendo- además tengo derecho a divertirme fuera de aquí, ya no soy una niña.

-¿Qué no entiendes que hoy menos que nunca debes salir sin protección? -dijo Jack- Paolo esta aquí y más cerca de lo que esperábamos.

-Se llama Pietro -lo corregí- y me vale pene si el papá de Aaron duerme en el departamento vecino, yo saldré y punto.

-¡Milla, esas palabras! -me regaño Nick saliendo de la cocina.

-¿Por qué siempre estas en la cocina -pregunte.

-Amo la comida -se encogió en hombros.

-No, yo amo la comida -dijo Brad- lo tuyo es algo enfermo, tu no comes para vivir, vives para comer.

-Como sea -dijo Nick- tenemos que depositarle dinero a Adam.

-Ya estoy harto de que ese imbécil nos siga chantajeando -dijo Brad enojado.

Se escucho el llamado de alguien en la puerta, todos nos vimos entre nosotros.

-¿Esperan a alguien? -pregunto Trent.

Todos negamos inmediatamente.

-Bien, chicos vayan por sus armas y denle una a Milla -dijo Trent.

¡No te metas con Los Cinco!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora