CÓMO HACER QUE TU VIDA PELIGRE CUANDO VAS A BUSCAR EL PAN
Chele
El fin del mundo empezó cuando un pegaso aterrizó sobre el capó del Toyota Prius de Paul Boflis en Estados Unidos mientras que yo me enterraba la aguja en el dedo índice por millonésima vez sentada en el sofá de la sala de mi casa en Cuba.
-¡¡PIIIIIIIIIIIIIIIIINGAAAAAAAAAAAA!!
Solté de inmediato la maldita aguja de los mil demonios hija de su puta madre alfiler y me quité el inservible dedal hijo de la chingada. Oficialmente no servía para la costura. Lo único que sabía hacer bien era coser botones.
¿Cómo le hará la rubia para coser tan fácilmente? ¿Brujería? ¿Magia negra? ¿Sacrificios humanos? ¿Sacrificios animales? ¿Buda? ¿Jesús?-pensé mientras chupaba la sangre de mi pobrecito dedo.
-Es malo decir malas palabras-Mi primo Yankiel apareció en la sala y se sentó junto a mí.
-¡Cojone, qué susto! ¡Pinga!-Di un respingo en el lugar del susto que me dio y el muy hijo de su mami solo se rió de mí-Me chupa un huevo si es malo o no decir malas palabras. Cómo si no se dijeran sin ton ni son en esta casa...
-Mamá dice que las niñas y los niños no deben de decir malas palabras-Insistió él mirándome atentamente con sus ojos.
-¿Ah, sí? Mira cuánto me importa: ¡¡Jodida aguja hija de perra, espero que te oxides bien rápido y te partas en mil prostitutos pedazos de mierda!!
Mi primo estalló a carcajadas y yo sonreí olvidándome un poco (solo un poco) de mi dolor de dedito.
Yankiel debía cumplir ya doce años en octubre. Faltaba un par de meses para ello. Se había bronceado demasiado en la playa y a veces terminaba con unas marcas de quemaduras bastante cómicas y curiosas como esa vez que salió con el dibujo de una corona de laurel en las pompis (Jajajajaja 🤣🤣🤣). Llevaba el pelo negro rizado un poco despeinado y sonreía de lado como un donjuán, así que de seguro se volvería un rompecorazones cuando creciera.
Él siempre ha sido mi pequeño pichoncito. Siempre me seguía a todos lados por la casa cuando éramos pequeños. Muchos solían confundirnos por hermanos ya que éramos de los pocos en la familia con el pelo negro en lugar de castaño y también porque solo nosotros dos conservábamos los dos apellidos de nuestras madres intactos.
¿Por qué me encontraba con mi primo en la sala de mi casa en Varadero en lugar de estar en el campamento preparándome para la lucha y formulando y llevando a cabo estrategias de guerra? Todo eso tiene una sencilla explicación.
La gran mayoría de mis familiares siempre se reunían aquí en las vacaciones.
(Rápida aclaración: en Cuba y en el yuma las vacaciones no son en el mismo lapso de tiempo. Aquí las pruebas finales se hacen en junio para dejar libre julio y agosto. Allá en Estados Unidos empezaban las clases en agosto porque hacían los exámenes finales por mayo)
Así que tuve que venir a la reunión familiar porque mi tío Fred y mi tía Catalina habían pasado a recogerme "debido a que yo no podría pagarme el vuelo" y no fui tan sinvergüenza como para decirles que no pensaba asistir. Aparentemente se les había olvidado que yo tenía un tutor legal y creían que me había quedado en una especie de orfanato/campamento. No me molesté en corregirlos. Solo los seguí.
Y henme aquí... Tratando de coser la raja de un short de mi prima Mercedes (Benz 7u7) antes de que ella se diera cuenta de que se lo rompí. Decidí mejor dejárselo a la tía Valentina, la costurera de la family.
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Chele y los dioses del Olimpo (Percy Jackson)
De TodoDISCLAIMER: Aunque no creo que sea necesario... Pero, bueno. Evidentemente el mundo y muchos de los personajes que se presentan en la historia no son míos sino del tío Rick. WARNING: Tiene spoilers de absolutamente todos los libros en los que aparec...