Pray for Lumière

RELIGIOUS

Los pequeños crecieron en el seno de una familia bastante apegada a la religión, una familia religiosa hasta las entrañas.
Estudiaban en colegios religiosos, acostumbraban ir en familia cada domingo a medio día a misa sin falta, apoyaban en las celebraciones que hacían para el pueblo y, en algunas ocasiones, organizaban pequeñas recolectas para la parroquia, Cheryl hacía deliciosos postres para apoyar a la caridad de esta y William ayudaba con las ventas, claro que junto a las demás familias que de igual forma asistían y también cooperaban, mientras que los pequeños disfrutaban conviviendo con los demás niños hijos de las demás familias, también acudían a cursos que llegaba a impartir la iglesia para niños y participaban en las actividades que se realizan.

Su vida era comúnmente buena para vivir en el pequeño pueblo en dónde crecían.
Eran unos niños adorables; Asher un niño educado, amable, carismático, muy estudioso e inteligente, era un tanto tímido, por lo cual se le dificultaba hacer amigos con facilidad, pero eso no era problema para él, ya que su familia lo hacía feliz y convivía con su pequeña hermana, la cual consideraba también su amiga. Meryl por su parte también era una niña encantadora, con los mismos valores y virtudes que su hermano, siendo educada, amable, estudiosa, inteligente y de más, pero a diferencia de su hermano, ella era un poco más extrovertida y podía hacer más amigos y amigas con facilidad, siempre contando también a su hermano mayor.
Tenían una buena relación de hermandad, y como cualquier otra, podían llegar a tener sus diferencias por cosas insignificantes, pero sus padres siempre intervenían haciéndoles entrar en razón para no pelear por cosas de lo que se diera el caso, pronto lo solucionaban y se volvían a tener ese bonito cariño de hermanos.

Junto con sus padres, cada noche como de costumbre antes de dormir, hacían una oración familiar, en donde William o Cheryl oraban agradeciendo por cada día; pedían por su familia, por el bien de esta, agradecían la bonita familia que eran y lo que tenían, también pedían por que las personas que lo necesitaran igual fueran ayudadas, por el perdón de los pecados y demás mientras los pequeños solo escuchaban respetuosamente siguiendo la oración en su mente.
Al finalizar su padre les contaba un cuento para dormir, pero no eran los típicos cuentos que a todos los niños se les cuentan, si bien, algunas veces sí llegaban a escuchar algún cuento así, pero en la mayoría de las veces se trataba de alguna historia de la biblia, que igual manera a los pequeños les encantaba escuchar y eran felices al terminar los días así.