Después de todo, Lumière nunca fue realmente malo. Tenía el poder para hacer daño y ser aquel ser cruel y despiadado que todos dicen y a como se le ha pintado y dicho durante tantos siglos, Lumière seguía siendo un ángel con mucho conocimiento y poder, pero no lo usó para hacer el mal.
Desde un inicio al interesarse por la vida humana simplemente defendió el libre albedrío, quería que los nuevos seres en el planeta -que tiempo después se volvió también su hogar- tuvieran conocimiento sobre lo bueno y lo malo, simplemente quería darles la libertad de pensamiento y decisión, creyó que podía hacerle bien a todo el mundo a pesar de lo que su superior le aconsejaba y no lograba entender, compriendiéndolo tiempo después y obteniendo como castigo ser expulsado del reino de Dios: el cielo, y a su vez, convirtiéndose en Diablo y Satanás.
Tristeza y soledad... un villano con un pasado elaborado no mal intencionado, pero sin nadie que escuche o conozca su verdadera historia.
Lumière no es malo, la maldad se le fue señalada hace eones. No se rebeló, solo quería un bien para la creación que Dios tanto amó desde un inicio.
El libre albedrío se adquirió y cada individuo decide que hacer con ello y cómo manejarlo, pero ya adquirido y junto con ello se dio el pecado y por consiguiente: la muerte.
Se necesitaba de lo malo para creer en el bien, y es que como en todo, debe de haber un perfecto equilibrio.
No puedes notar las estrellas a la luz del día, se necesita de la oscuridad de la noche para apreciar su belleza.
Se necesitaba un mal para que el bien sobresaliera, así que Dios simplemente eligió al más bello y amado de sus ángeles y como parte de las consecuencias de sus actos, se convirtió en eso.
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Pray for Lumière
SpiritualEl Diablo ha sido considerado como la personificación del mal mismo, lo ven como un ser cruel, que ama el pecado, disfruta hacer sufrir a la humanidad, engañar y seducir a quienes están en ignorancia. La realidad es que ese ser alguna vez fue un áng...
