Dulogía Ellas I; son libros independientes, distintas épocas y con distintos personajes, pero ambos son relacionados con la poligamia.
Acostarse con tres hombres el día de tu cumpleaños y luego huir suena lógico, pero que pasaría se dos años despué...
Tenía el plan perfecto, y aunque a Dean y Travis les parecía demasiado, en ese momento fui egoísta.
Quería volver a estar con Cloe, y aunque Dean estuviese con Hope, y Travis con Shana, también querían a la castaña de nuevo en nuestra cama.
Llevaba varios meses trabajando en esto, era sencillo. Miré de nuevo la casa, y vi a Cloe salir junto con Landon, por un momento, me dieron ganas de ir y contárselo todo, pero no me creería.
Suspiré, y cogí las fotos, eran de Landon y la madre de Cloe entrando en uno de los moteles de la ciudad.
Abrí la puerta y caminé con la esperanza de que fuese la mujer quien me abriese.
—¿Quién eres? —era ella.
Estaba con una bata rosa, de lo más hortera, tenía el pelo mojado, por lo que supuse que se había duchado.
—¿Hay alguien más en casa?
Ella negó mientras me miraba mientas pestañeaba varias veces.
—Adelante.
Pasé y busqué los sofás. Cuando estuve sentado, pude ver como ella se sentaba en frente de mí, y abría un poco su bata.
Quité la vista y me centré en el sobre.
—No vengo a follarla, realmente en un tiempo será a su hija a quien me folle.
—¿Qué estás diciendo?
—Sé que follas con Landon.
Vi como el color se iba de su cara, así que sonreí y le mostré el sobre.
—La puedes romper, tengo copias.
—¿Q-Qué quieres? ¿D-dinero?
—¿De ti? No me hace falta —sonreí cínicamente —lo que quiero es que el día que Cloe se enteré de tu infidelidad, que se enterara, tú la echaras de casa, tu amante se encargara del resto.
Me levanté y señale su bata.
—Átese de nuevo por favor.
—¿Qué quieres de Cloe?
—No te importa, solo procura que no se entere en los próximos seis meses.
Ahora estábamos ocupados en cuidar de Ryle, y además terminando varios edificios.
La mostré una sonrisa, y luego me dirigí hacia la puerta.
—Y que no se te olvide, si en algún momento nos vemos y estoy con tu hija, espero que actúes también como con tu familia.
Me fui de allí y miré el rastreador, teníamos a Cloe vigilada, para evitar que se encontrase con Landon y su madre todavía, y me alegré al saber que estaba en la biblioteca sola.
Así que fui a un bar, donde trabajaba Landon, y me senté en uno de los taburetes, pedí una cerveza, y agarré su muñeca antes de que se fuese.
—Tenemos que hablar —susurré, el bar no estaba muy lleno, por lo que podrían oírlos.
—¿Te conozco?
—No, pero tienes que venir conmigo, ahora.
Me levanté y fui hasta el despacho del jefe. Él no tardó en entrar y en mirarme.
—Te propongo un trato.
Él frunció el ceño, así que continue.
—Sé de tu amorío con la madre de Cloe, no te esfuerces en negarlo, ya he hablado con tu amante.
—¿Qué es lo que quieres? ¿Y de que conoces a Cloe?
—El día que ella lo descubra, la llevaras a donde yo te digo —le doy una tarjeta, donde está el número del jefe de seguridad —sobre lo otro, te da igual.
Vi que lo miraba, y luego me enfrento.
—Y si no quiero llevarla ahí.
—Lo harás, o toda tu familia sabrá la verdad sobre lo que hacías con su madre.
No dije nada más, me fui de allí con la intención de irme, antes de que él me parase.
—¿La harás daño?
—No podría hacerla daño.
Él sonrió nostálgico, y supe que era por el daño que sabía que le iba a causar cuando supiese lo que hacía con su madre.
Cuando llegué a casa Dean estaba con Ryle en brazos mientras tomaba biberón, y Travis mirándola con odio.
—No me ha dejado estudiar.
Travis quería terminar una carrera de siete años antes de los veintiuno, y aunque a Dean y a mí nos había costado hacerlo, la nuestra era de cinco años.
—¿Qué tal el divorcio?
—Mal, no tenemos separación de bienes, y no pienso darle la mitad de todo mi patrimonio, ella no ha trabajado nunca, y ya va siendo hora.
—¿Qué vas a hacer?
—Demandas, ella no quiere firmar porque perdería mucho, así que intentaré llegar a tratos con su abogado.
Dean asintió concordando que era la mejor, y después, me fui a otro de los bares, la verdad es que, aunque Cloe, nos había enflechado. Habíamos llegado al acuerdo, de follar con quien quisiésemos, siempre y cuando ya podamos tenerla con nosotros, ella será la única.
Habían pasado un año, desde esa conversación que tuve con Landon, por lo que había decido dar otro paso.
Los detectives se encargaron de conseguir las fotos, y se las mandamos anónimamente a Cloe, esperando que todo explotase.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
