Crepúsculo (LUNATION)

SUEÑO

El camino fue rápido, más porque Edward quería averiguar exactamente a dónde íbamos. 
Fue una sorpresa para él cuando le expliqué que acamparemos después de explorar el bosque. Quería ver animales de cerca, alimentar a algunos ciervos, ardillas y demás animales que googleé, nunca había estado tan cerca de estos ambientes y a nadie más le interesaba. 

Le expliqué a Edward el plan, haríamos varias cosas extremas como caminar hasta la punta de la montaña, para entonces aventarnos de la tirolesa que está ahí, después acamparemos. Sin embargo para no cargar todo, se quedará en el auto lo que compramos, la casa de campaña y demás cosas, si necesito algo, él tendrá que regresar. 

—Una regla muy importante es que debes cargarme cuando me canse. — Le advertí.

—¿Tendré que cargarte cada 5 minutos? — Preguntó seriamente entrecerrado los ojos. 

—Efectivamente. — Bromeé. — ¿Tendrás paciencia conmigo? 

—He tenido paciencia contigo desde que te conocí. — Me recordó. 

—Pero esto es diferente, a mí me gusta aquí y traje una cámara instantánea. Me detendré mucho a tomar fotografías.

—No te preocupes. —Me pasó una mano por la cintura y se acercó a mí para darme un beso en la sien. — Cuando estés lista. 

—Estaba lista, ahora creo que no. — Le pasé mis manos por su cuello y él me rodeó por la cintura. Lo besé lento, tomándome mi tiempo y forzandome a poder ser capaz de recordar justo este momento, con el sonido de las aves, el viento moviendo los árboles, el olor de Edward, sus manos pegándome hacia él y finalmente sus labios fríos sobre los míos. Cuando finalmente me alejé lo miré intensamente unos segundos antes de poder articular una palabra. — Lo siento. 

—¿Por qué te disculpas? — Parecía confundido. 

— Por besarte tanto. — Miré hacia otro lado sin soltarlo del cuello. — Por querer tener tanto contacto contigo. — Pero es mi única oportunidad, pensé. 

— Está bien. — Me apretó más hacia él. — Quiero que lo hagas. — Me susurró al oído, yo giré mi rostro, me acerqué a su oído y susurré.

—No sé querer despacio. — Él puso su cara frente a la mía, mirándome. No había estado tan cerca de él nunca, sentía cosquillas en mi estómago. —Y te quiero. — Susurré de nuevo. 

— Te quiero. — Edward susurró de vuelta y me soltó besando mi frente. 

—Entonces creo que estoy lista. — Suspiré y comencé a caminar por el sendero hacia la punta de la montaña. 

— Escucho diferentes animales, no sólo ardillas y ciervos. No creo que este bosque sea muy seguro. — Se oía preocupado.

—No lo es. — Me topé al entrar con una gran diversidad de colores. — Lo clausuran en el año 2013. — Tomaba algunas fotografías mientras seguía hablando. — Por no ser seguro, una persona casi muere y cerraron el lugar. Si no hubiera sido porque el hombre traía un arma, el animal lo hubiera matado. 

—¿Por qué querrías poner tu vida en peligro, entonces? — Edward me seguía muy de cerca. 

—Nunca lo haría, soy pésima en cuidarme en un ambiente tan salvaje, por eso vine con el experto. — Me giré para ver a Edward. —Además, el hombre murió en el 2014, se ahogó con su comida… cuando te toca, te toca. — Seguí mi camino tratando de ser más rápida, parecía que lloverá y no quiero caminar sobre el lodo, me rompería algo seguramente. 

—Espero que no te toque hoy. — Parecía un poco tenso y excesivamente cuidadoso, no dejaba que ni las arañas me tocaran y cuando los mosquitos se hicieron notar, Edward los mató a todos.