Polos opuestos

Capítulo 30 [ Modo: mandon]

Olivia

Me cruzo de brazos y mantengo mis ojos fijos en cada uno de sus movimientos.

— Puedes dejar de verme así? Tu fuiste la que planeó todo esto. — me recuerda.

— No estaba en mis planes hacer eso, pero tuve que hacerlo.

Leo suspira, y asiente con la cabeza.

— Lo sé, pero esa decisión te hará meterte en problemas y más si ya tienes un antecedente del mismo caso. — me explica.

Me quedo en silencio, molesta.

Sé a que se refiere, la vez que peleé y mande al hospital al chico por golpearle en una zona muy sensible y poco justa, pero así eran esas peleas.

Los padres del chico y él me pusieron una denuncia ni bien se enteraron de lo que pasó, no fuí a restada por ser menor. Le pedí disculpas al chico y a sus padres, ellos las aceptaron y también aceptaron que la decisión de su hijo fue estúpida al ir a esos lugares.

— Y que haremos, entonces? — pregunto.

Él me mira y se en lo que está pensando. Niego con la cabeza.

— Olivia, él ya sabe cómo eres y si vas te va a dar las dos mismas opciones; droga o pelear. — me recuerda. Bufó.— Si van uno de ellos y no tan llamativos, podrán pasar desapercibidos.

— No y no. Ninguno de ellos irá, prefiero pelear o consumir, pero yo. — zanjo.

Él se pone enfrente de mí y me mira serio. Estamos en el salón vacío de siempre, me contó que le mostró el vídeo a su tío para ver si eso era evidencia suficiente y dijo que en parte sí, pero el que yo haya peleado no ayuda.

— Entiendo, que no quieras arriesgar a ninguno pero que otra opción tenemos? Es esa, dile a Milo. — sugiere.

— No, este mundo no es para él, con suerte es mi amigo.

— Y Julieta? Ella tiene su lado criminal.

— No, Iara me mata.

— Iara?

— Julieta me descuartiza. — vuelvo a negar.

— Y Enzo? Él ya sabe sobre ese mundo, y por tí lo haría.

Lo miro seria.

— No, él no. Con más razón, ya estuvo en eso y no voy a ser la causante de por la que vuelva al mundo en el que le costó salir. — demando.

No me lo perdonaría sí le hace mal ver ese mundo otra vez y menos si el idiota de Cameron le dice algo.

Leo me mira frustrado.

— No sé, entonces. Joder, Olivia. Les dices a ellos o mandamos todo a la mierda. — dice molesto.

— Pues bien, no me ayudes pero ellos no irán. — determino molesta.

Salgo del salón, dejandolo molesto y desconcertado ante mi arrebato. Camino por los pasillos como un demonio y empujo a algunos que se meten en mi camino. Me detengo cuando choco con un pecho duro, iba a gritarle pero me calle al ver a Enzo.

— Que sucede, Oliv? Por qué estás así de molesta? — pregunta, mirándome con preocupación.

Sus brazos me rodean suavemente y yo solo lo miro a los ojos, sus ojos negros que me tranquilizan.

— Nada impor... — me callo al ver a los demás.

— Olivia, estás bien? — pregunta Iara en voz suave.