Enzo
El delicioso olor de la pasta se hace presente al bajar por las escaleras, me encamino a la cocina donde veo a Julieta, Iara y Milo cocinando.
Si, pasta al mediodía y con veintisiete grados en verano.
— Buenos días, chefs. —saludo al adentrarme en la cocina.
Milo e Iara me sonríen para volver a cocinar, mientras que Julieta se sienta en una de las sillas de la mesa y yo me siento a su lado.
— Y la ninfómana?
— Está jugando y... va perdiendo, así que, está como una fiera enjaulada.
Ella ríe y niega con la cabeza.
— Me imagino, una vez me tiro el teclado por la cabeza, pero llegué a esquivarlo y el teclado se rompió al chocar con el piso. — cuenta. — Y sabes que es lo peor? — cuestiona y alzo una ceja. — Que me culpo a mi por esquivarlo! Casi muero. — exclama.
Sonrió divertido.
— Si, suena muy a Olivia. — sacudo la cabeza. — Como están para hoy? — les pregunto cuando los otros también, se sientan.
Hoy es la entrega de diplomas y la última fiesta donde estaremos todos reunidos. Es algo completamente alucinante, si bien, no soy muy cercano con todos pero se extrañará ir todos los días, sus murmullos, sus risas, sus presencias, en general. Lo bueno, es que hace menos de dos meses cambiaron las reglas, ahora terminamos el instituto a los dieciocho como la gran mayoría.
Aunque yo no viví todo el instituto presencialmente, ya que estuve dos años en rehabilitación para adictos, entonces, lo hice virtualmente, hasta que pude volver.
Iara apoya su cabeza en el hombro de Julieta y ella besa su cien.
— Pues a mí me queda un año aún, pero de imaginarlo me entran ganas de llorar. — comenta.
— A mi igual y hoy se termina todo. — sigue Milo, con su mirada triste.
Julieta suspira.
— Es... raro, siempre desee terminar el instituto y ahora que está pasando, es abrumador. — murmura.
Asiento de acuerdo con ella.
— Les traigo unos pañuelos o vuelvo en un rato?
La voz de Olivia nos hace girar la cabeza para verla acercándose a nosotros, iba a venir a sentarse pero su atención fue a la cocina, se acerco con una sonrisa y apago el fuego para empezar a servirse la pasta.
Todos nos quedamos viendola fijamente y ella al sentir nuestras miradas dejo de sonreír para fruncirnos el entrecejo.
— Qué me ven? Sírvanse. — espeta.
Con su plato en mano y su cubierto se acerca a la mesa, sentándose a mi lado. Iara nos sirve al resto, nos acomodamos y en un agradable silencio empezamos a comer.
— Y tú, Oliv? — le habla Milo, ella lo mira confundida. — Sobre el tema del instituto, como te sientes? — aclara.
— Bien.
— Una mujer de pocas palabras. — se mofa Julieta.
— Qué quieren que diga? — nos mira. — No quiero a los profesores, con los únicos que me habló son ustedes y estamos aquí, no? Me siento bien.
Iara la mira confundida.
— Yo siempre te ví muy social.
Olivia suspira y me mira un momento.
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Polos opuestos
Teen Fiction[ Romance ] +18 Los polos opuestos se atraen, sí, pero ¿Durarán lo suficiente para llegar a amarse? Es posible saciar tu curiosidad y listo? Para Olivia French solo aumentará. Enzo es un chico como cualquier otro que tiene a la chica más codiciada d...