Polos opuestos

Capítulo 38 [ Poco romántico pero original ]

BlancaArmijosZamora✨ Feliz cumpleaños, capitulo dedicado.

Enzo

Examen tras examen.

Días en lo que duermo poco por estudiar, entrenar y ahora que estamos organizando el partido benéfico.

Mila junto a varios chicos y chicas de algunos equipos del instituto están moviéndose para terminar de organizar el lugar. No es un lugar que demuestre felicidad, pero ellos hacen el esfuerzo de que se vea bien con colores cálidos, mesas con comida y cajas con ropa para las personas que lo necesitan.

Por un momento me paralice al descubrir que era el lugar al que vine para salir de mi adicción, hay algunos que conocí y aún siguen aquí pero muestran un gran avance en su rehabilitación.

Mi vista se centra en la puerta principal del amplio salon que tiene el centro, los chicos, Olivia y los del equipo de fútbol se hacen presente.

Frunzo el ceño y me cruzo de brazos.

— Olivia, gracias! —chilla Mila a mi lado.

Todos nos ven y se acercan a nosotros.

— Son todos tuyos, Mila. — le responde Olivia.

Mila mira entusiasmada a los chicos y ellos no entienden nada, pero le sonrien provocando un leve sonrojo en ella.

— Genial. — mira a los amigos de Olivia. — Y hola chicos, gracias por la colaboración de la ropa.

— No hay de qué, Mila. — le sonríe Milo.

Si antes estaba algo roja ahora parece un tomate.

— Milo, hola. — murmura con una pequeña sonrisa.

Olivia se pone a mi lado.

— Se juntaran los tomatitos? — me susurra en tono complice.

Una pequeña sonrisa se plasma en mí, ambos miramos a Milo y Mila que se alejan hablando, uno más rojo que el otro, detrás de ellos van los chicos de fútbol.

— Serán un volcán de lo rojo que están. — comentó.

Olivia se pone enfrente de mí, pone sus manos en mis brazos y los descruza para tomar mis manos y entrelazarlas con las suyas.

— El pene de Milo será un volcán cuando estén juntos. — bromea.

Alzo una ceja.

— Acabas de imaginar a ellos follando? — pregunto.

— Cariño, persona que miro persona que ya imagine follando. — responde, encogiéndose de hombros.

— Joder, sí que eres mente sucia.

Me sonríe con fingida inocencia.

— A tí, también te imaginé. — acerca su rostro al mío. — Varias veces, y varias veces me corrí imaginandolo.  — dice sobre mis labios pero sus ojos no se apartan de los míos.

Paso saliva ante su voz baja y tentadora, me remuevo un poco en mi lugar y froto suavemente mi erección ya despierta, sobre su bajo abdomen. Ella lo siente, sus ojos dándome esa mirada intensa y humedece sus labios.

— Como haces esto en un lugar lleno de personas? — mascullo.

— Es un don. — me guiña un ojo, divertida.

Viste un body negro con abertura en sus pechos, junto a un pantalón negro al cuerpo, marcando más su hermosa silueta y su pelo azabache está con dos pequeñas colitas en cada lado, en la parte frontal de su cabeza, sus mechones azules están sueltos, caen sutilmente sobre su rostro.