_Mami_dice Sophia.
_Dime cariño_digo caminado con ella de la mano mientras Alisson reposa su cabeza en mi hombro totalmente dormida.
_¿Podemos ir a cenar?_pregunta.
_¿Te has cansado de
jugar?_pregunto mirandola con duda._Si, me he cansado, de echo tengo hambre y ya es la hora de cenar_dice caminado hacia el auto.
Está niña habla con toda una persona mayor, aveces me sorprende su inteligencia y madurez para expresarse al tener que hablar.
_De acuerdo, iremos a cenar a tu restaurante favorito, pero sólo porque tu me lo pides_digo abriendo la puerta del auto y así poder dejar a Alisson en su asiento.
_Gracias mami. Todavía me falta pedirte algo_dice colocándose el cinturón de seguridad.
_¿Y que es?_digo con mi vista fija en el movil respondiendo un menaje de mi madre sin levantar la vista de este.
_Que llames a William y lo invites a cenar con nosotras_dice con una amplia sonrisa.
_Se por donde vas Sophia y sabes que eso no va a suceder _le advierto con cara sería.
_Yo quiero que pase_susurra, pero logró oir lo que dice.
_Llamale y ahí vemos si está ocupado_dice Sophia mirando por la ventanilla del auto.
_Esta bien, tu ganas_digo buscando su número entre mis contactos.
Cuando encuentro su número marco este esperando a que atienda, luego de cinco largos tonos escucho su ronca y aguda voz_¿William?_pregunto una vez que responde.
_Emily, ¿A que se debe tu inesperada llamada?_dice con sarcasmo.
_Hoy no estoy para tus ironías, solo llamaba para decirte si querías venir a cenar con nosotras_digo viendo por la ventanilla del auto esperando su respuesta.
_Claro_dice del otro lado de la línea.
_Esta bien, te enviaré la ubicación por mensaje de texto, ahora tengo que conducuir_digo.
_bien. Espero tu
mensaje, adiós_dice._Adiós_digo para finalizar la llamada.
_Ya está echo_digo viendo la gran sonrisa de Sophia
Enciendo el móvil nuevamente y le envió rápidamente la ubicación para no perder más tiempo y así poder encender el auto y irnos hacia allí. En cuanto llegamos al lugar puedo verlo en la puerta principal esperándonos. Por suerte Alisson se había despertado minutos antes así podría estar un poco más tranquila y no cargarla por todo el lugar ya que cada vez está mas pesada y me cansa los brazos.
Caminamos hacia el con paso lento. me alegra que mis niñas están sumamente felices ya que aman este restaurante como también pasear en la noche por la cuidad y con la luz de la luna de por medio.
_Que bellas damas tengo ante mis ojos_dice mirando a mis hijas y luego a mi .
_¿Qué se dice?_pregunto al ver que no responden ninguna de las dos.
_Gracias William_dicen caminado hacia el para así poder abrazarlo.
_De nada princesas_dice bajando lentamente para quedar en cuclillas y así abrazarlas.
_Gracias William, por cierto tu también te ves muy bien_digo entrando al lugar.
Nos sentamos en una mesa para cuatro. Minutos después llega el camarero con la carta de alimentos disponibles para esta noche, retira el cartel de reserved y se retira de nuestra mesa en cuanto decidimos que ordenar.
_En un momento regresó, ire a retocar mi maquillaje_digo al ver como Sophia empezaba a preguntar cosas sobre el y yo. Colocandome completamente nerviosa, incómoda y ansiosa por tal situación. Se que hace tanto no lo hago pero tengo que volver a probar su sabor.Entro al baño y al comprobar que no hay nadie, tomó aire repetidas veces y me miro en el espejo. Este hombre griego me sube la temperatura con sus estúpidas e innecesarias miradas y no puedo hacer nada para impedirlo.
Necesito un cigarrillo. Espero a que una mujer que acaba de entrar termine de retocar su maquillaje y al verla salir me encierro en unos de los cubículos. Sin esperar enciendo uno y los llevo a mis labios inhalando el humo calmante. si, justo lo que necesitaba.Varios segundos después escucho a otras mujeres entrar, trato de ocultar mis pies cuando una de las mujeres se queja del olor a cigarrillo, como estoy casi al final y cerca de la ventana en la parte de arriba, no se nota el humo. Sonrio, ni siquiera en los lugares más sofisticados sigo las reglas cuando se trata de bajar mi ansiedad.
Otros segundos después escucho nuevamente la puerta abrirse pero no oigo taconeo, así que lo más probable es que las mujer que estaban antes ya se han ído, lo ignoro, ya casi termino mi cigarrillo para volver a ver la pesadilla de ojos azules.
Tocan la puerta de mi cubículo de manera fuerte y repetitiva provocando que me sobresalte un poco._¡Está ocupado!_digo dándole la última calada a mi cigarro.
_¿Terminaste de joderte los pulmones?_santa mierda. Me quedo de piedra al reconocer esa ronca voz_ Abre la puerta, ahora.
Dios, no, no, no. Sacame de aquí, que se abra la tierra mejor y que me trague, no puedo verlo, Me quedaré muda cuando me rete. No puede ser, debo abrir y enfrentarlo. Suspiro, si se comporta yo también lo hare...O eso espero.
Cuanto hasta tres y después de haber arrojada la colilla del cigarro en el retrete abro la puerta despacio, joder, aquí vamos.
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𝙏𝙪 𝙮 𝙮𝙤 𝙨𝙞𝙚𝙢𝙥𝙧𝙚 𝙟𝙪𝙣𝙩𝙤𝙨 [𝙨𝙚𝙜𝙪𝙣𝙙𝙖 𝙥𝙖𝙧𝙩𝙚] ✔️
Teen FictionQuedar viuda y que aún no puedas superar a tu prometido por completo es devastador, más si tus pequeñas hijas preguntan por su padre fallecido con frecuencia. ¿Cómo abres tu corazón ante alguien más? ¿Cómo haces para volver por si solos esos latido...