Patrimonio Heredado

Capítulo 52: Feliz matrimonio

Aunque Xavier estaba de vacaciones, aún tenía que asistir a algunas reuniones militares, por lo que su secretario Sheng Xiu llamó obedientemente a la puerta de su dormitorio cuando llegó la hora. El joven secretario adivinó que el Señor Almirante debía de haber dormido mal; después de todo, la ecología de la Tierra era muy diferente a de los planetas exteriores y probablemente necesite, como siempre, de una taza de café para empezar el día.

Sheng Xiu continuaba pensando en cuántas tazas de café podría hacer con el único café en polvo que quedaba cuando se abrió la puerta. Estaba a punto de hacer un saludo militar, pero se congeló ligeramente al ver quién era el que abría la puerta, y sólo después de un momento volvió a sus cabales y dijo: "Señor del Almirante, ha vuelto".

Yan Yuchun soltó un "Hmm" Ya había terminado de lavarse y estaba vistiendo su ropa rigurosamente. "¿Xavier tiene algún horario para hoy?".

"Tiene una reunión en el cuartel militar a las dos de la tarde".

"Oh." Yan Yuchun levantó distraídamente su muñeca para ver su reloj: "Entonces puede dormir otra media hora, llámalo después de que pase ese tiempo, ¿dónde está Tyrone? Necesito usar el coche un momento".

"Está abajo".

"Está bien, gracias por tu arduo trabajo, yo me iré primero, recuerda despertarlo para que pueda almorzar". Yan Yuchun levantó sus pasos para salir, pero vaciló y regresó a la habitación.

La no tan amplia habitación seguía llena de ese olor a sexo, sólo que mucho menos intenso que el de la noche anterior, Yan Yuchun había limpiado todo lo que pudo, pero aún asi era imposible borrar del todo esos rastros tan rápidamente. Sin embargo, no le importaba tanto ahora, él y Xavier ya eran considerados legalmente esposos y aunque hicieran algo íntimo juntos, seguía siendo normal. El hombre en la cama estaba acurrucado bajo las cálidas sábanas, mostrando un poco de su pecho desnudo. La mirada de Yan Yuchun se posó en una cicatriz rosada, la cual obviamente era una nueva herida, y su corazón no pudo evitar apretarse, dudando por un momento, extendió sus dedos para tocarla suavemente. Mirando al hombre, que seguía sumido en un profundo sueño, con las facciones duras, los ojos fuertemente cerrados y la frente fruncida, se preguntó si estaba teniendo algún tipo de pesadilla.

Sus largos dedos subieron lentamente, alisando los pliegues de su entrecejo. Yan Yuchun se inclinó y le dio un suave beso en la mejilla, murmurando: "Bienvenido de nuevo, mi querido Xavier".

Media hora más tarde, Xavier fue despertado por Sheng Xiu. El almirante todavía estaba un poco confundido. Cuando su conciencia gradualmente se volvió clara, de repente preguntó: "Xiu, ¿dónde está Yan Yuchun?"

Sheng Xiu dijo tranquilo: "El esposo del Almirante ya se ha ido, dijo que vendría a buscarte después de su reunión para volver a la mansión".

Xavier frunció el ceño y se alisó el desordenado cabello: "¿Quién quiere que venga a buscarme? ¡Y no lo llames esposo del Almirante!"

Xavier estaba un poco molesto por haberse despertado con la noticia de que Yuchun ya se había marchado, podía sentir que Yan Yuchun había venido a verlo con una pequeña disculpa en su actitud, pero esto era demasiado insincero, ¿En realidad se fue temprano porque no lo quería? ¿O de verdad era porque el oriental tenía una reunión? Xavier se despertó completamente cuando pensó en esto: "No tenía ninguna prisa por volverme a ver, si no que era para llegar a tiempo a su reunión, ¿no?". La idea de que su tío lo veía como nada más que una cosa pasajera lo enfureció tanto que ni siquiera comió gran parte de su almuerzo.

La reunión en la Oficina de Guerra fue un poco aburrido, pero tenía que dar un informe más sobre lo que había sucedido en el campo de batalla. Xavier nunca se había interesado en nada más allá de su gestión, así que escuchó toda la reunión de forma despreocupada, expresando sólo su opinión cuando se trataba del futuro plan de batalla.