Capítulo 92: Acaparador de leche

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Bajo la supervisión del tío Rong, Yan Yuchun duró realmente una semana entera sin lavarse el cabello, y sólo después de ese tiempo se lavó por fin el pelo la cual ya estaba un poco graso. Después de lavarse, el tío Rong le secó inmediatamente y le hizo acostarse de nuevo bajo la manta, sin permitirle caminar. Xavier aún estaba de vacaciones, pero no podía ayudar porque no sabía hacer muchas cosas, lo único que había aprendido era probablemente a lavar los pañales del bebé.

Hoy en día había escasez de suministros, y aunque ciertamente hace cien años atrás los bebés llevaban todo tipo de pañales desechables, con la economía actual ya no podían permitirse suministrar más de ellos, por lo que volvieron a usar los pañales tradicionales. Con el frío que hacía y las muchas criadas que había en la finca, a Xavier no le habría correspondido hacerlo, pero Yan Yuchun vio lo improductivo que era así que le encargó ese trabajo.

El bebé podía orinar de 20 a 30 veces al día, por ende los pañales tenían que ser cambiados una vez por hora, lavarlos y secarlos frente a la chimenea, así que se podía afirmar que Xavier no tenía mucho tiempo libre a lo largo del día. Por suerte, lavaba los pañales con agua caliente y eso le ayudaba a no congelarse las manos, pero cada vez que entraba a la casa, su cara seguía siendo un poco fea e inexplicablemente afligida. Sobre todo cuando se acercaba a Yan Yuchun. "¿Cómo es que puede orinar tanto? Ni siquiera me da tiempo para lavarlo".

Yan Yuchun se rió y dijo: "Los bebés pequeños son todos así, probablemente tú también hiciste lo mismo cuando eras pequeño".

"Estoy definitivamente seguro que no". Xavier frunció el ceño: "Por lo menos, yo no tenía a nadie con la suficiente paciencia como para cambiarme los pañales de esa manera en aquel entonces, y nací en verano, así que podía ir completamente sin ropa y orinar a voluntad".

Yan Yuchun se quedó sin palabras, "Wow, eso fue muy fácil de admitir para ti". Añadió con tono tranquilizador: "Será más fácil de sobrellevar cuando sea mayor, y en realidad no es muy duro para nosotros, es el tío Rong quien lo tiene más difícil, casi siempre lo cuida durante el día. Yo sólo tengo que darle de comer dos veces por la noche". El pequeño bebé se comportaba un poco mejor por la noche, sólo se levantaba una o dos veces y no lloraba mucho, en cambio realmente era más difícil de criar durante el día. De hecho, había muchas mujeres en la mansión que podrían ayudar, pero al tío Rong le preocupaba que no fueran lo suficientemente atentas así que casi siempre se ocupaba él mismo. Incluso trasladó su dormitorio al tercer piso temporalmente, sólo para poder cuidar mejor de Yan Yuchun y su bebé.

"Bueno, él realmente trabaja bastante duro". Xavier reconoció este hecho. Luego con un brillo en los ojos, pidió su propia recompensa: "Yan, quiero tomar leche".

El almirante no se avergonzaba de sus actos a puerta cerrada, y sus manos ya estaban en la ropa de Yan Yuchun mientras terminaba su frase, desabrochando con pericia su camisa y acercándose a "alimentarse". Yan Yuchun le empujó: "No, el bebé tendrá hambre más tarde, necesita ser alimentado una vez cada dos horas". Tenía los pechos llenos, pero eso no significaba que cuanto más grandes eran sus pechos, más leche tendría, y además tenía que repartirla entre un bebé pequeño y un hombre adulto, lo que no era realmente suficiente.

Xavier le mostró las manos: "Llevo tanto tiempo lavando pañales que se me agrietaron las manos".

Yan Yuchun hizo todo lo posible por contener su expresión: "Usas agua tibia".

"El agua tibia también se enfría en algún momento ya que siempre lavo los pañales por varias horas". Xavier le miró fijamente, cada vez más enfadado: "Los pañales de Dove siempre están sucios y huelen mal pero yo los he lavado todos como un buen padre, tienes que recompensarme, sólo tomaré un par de sorbos".

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