καλοψία #PGP2018

ты мне нравишься

Suspiró tecleando un par de veces, llevó ambas manos a su rostro, libero un bostezo y solo entonces reparó en la hora, 2:42 a.m. llevaba demasiado tiempo ocupado en unos cuantos papeleos, trabajo extra que había decidido llevar a casa, si bien tenía vacaciones por las fechas navideñas, no era alguien que dejara pasar el tiempo, no cuando en unas horas pensaba pasar el día junto a Yuri, después de todo era Navidad, el año pasado fue un momento hermoso, deseaba volver a pasar un momento así y quizás retomar aquello que dejó a medias en la noria.

Bufó borrando un par de letras, había estado tan cerca de confesar sus sentimientos, solo cuando llegó a casa se dio cuenta de la magnitud de ello y quiso esconder el rostro en la tierra, no tenía idea de dónde había sacado tal coraje, si lo pensaba, justo ahora no podría hacerlo, se planteaba demasiadas respuestas posibles, más malas que buenas y su temblé se veía afectado, dudaba de todo, de las palabras que usaría, del momento indicado para decirlas, del lugar o todo. Su cabeza era un caos. Tecleó con cierta molestia ante esos pensamientos, era realmente fastidioso temer tanto.

Se recostó en el asiento soltando un pesado suspiro, no podía concentrarse, su mente rondaba en Yuri, su rostro, sus ojos, esa sonrisa tan dulce, sus manos tan cálidas y sus labios, ah, no iba negar que había soñado con besar esos labios en más de una ocasión, escenarios demasiado hermosos que temía no poder recrearlo en la realidad. Miró nuevamente el reloj 3:00 am, no iba a poder seguir con esto, guardó el documento y apagó en portátil, apagó las luces y caminó hasta su cama en donde se metió bajo el edredón, estiró la mano cogiendo el celular que descansaba sobre el velador, lo desbloqueó observando el fondo de pantalla, una foto de Yuri y Anielka que había sacado en uno de los tantos paseos que daban juntos, esta era una de sus favoritas, ambos en su mundo, ignorando la cámara mientras se divertían juntos.

Sonrió apagando la pantalla, debía dormir, le esperaba un día agitado.

**

Revisó la lista una última vez, repasó cada cosa que estaba en el carrito de compras con el listado en su mano, se detuvo tomando un frasco más de leche y caminó hacía la dependienta, solo por hoy estaba permitiéndose gastar más de lo usual, después de todo era un día especial, navidad estaba a solo unas horas y quería que todo estuviese perfecto.

Este año iban a pasarla en su cabaña, su orgullo estaría encantado de decir que fue idea de Anielka pero realmente fue su idea realizar en su hogar, no era que no quisiera pasarla en casa de Otabek, reconocía que era un hermoso departamento, uno lujoso y lleno de comodidades, no es que estuviese criticándolo o algo por el estilo, con gusto pasaría tiempo ahí...el punto era de que sentía que esta vez le tocaba a él ser el anfitrión de esa velada, un gesto que devolverle al alfa. Con esa idea regresó a casa en dónde su cachorro lo esperaba feliz mientras decoraba el arbolito. El adía anterior se había encargado de la limpieza de su hogar, podía ser pobre, pero eso no quitaba que todo en su hogar estuviese ordenado y limpio, también había avanzado decorando las ventanas y sala, no era mucho, pero le daba un bonito aire navideño, más ahora que contaba con electricidad, podía apreciar las luces titilar, Anielka había estado encantado con ello.

–Sigue así, mamá va a preparar la comida, cuando acabes quiero que vengas para que almuerces y una vez que acabes vas a ordenar el desorden del cuarto que hiciste con tus juguetes- lo vio pasar por pequeño ataque de pánico, estaba seguro de que su cachorro había olvidado ese detalle mientras decoraba el arbolito.