cap. 44 - tiempo junto a ti

276 28 10
                                    

—¡Viniste!

Mi tono de voz es el doble de meloso de lo usual y creo que Andrew se da cuenta de ello. Levanta una ceja en gesto severo cuando me acerco a él.

—Sí, en eso quedamos.

Su respuesta tiene un tinte diferente a lo que estoy acostumbrada. La molestia se escurre entre las palabras, incluso cuando él parece estar esforzándose por esconderlo. Me detengo a pocos pasos de él, me toca obligarme a mí misma a parar justo en el momento que estuve a punto de saltarle al cuello. La manera en la que sus ojos miel me observan, a través de un frío análisis, me hace sentir pequeña y no toma demasiado para que las palabras de Marina se repitan de mi mente, acompañadas de una creciente sensación de ansiedad. Se forma un hueco en mi estómago ante la mera idea de una confrontación y mis dedos fríos empiezan a temblar.

Odio este sentimiento.

—No es lo que parece —murmuro con la voz algo ronca. Me veo obligada a carraspear para reiniciar mis cuerdas vocales y darle más seguridad a mi tono. Aunque al segundo me siento estúpida, ¿no se me podría haber ocurrido una frase menos cliché? Suelto un suspiro, por primera vez desde que nos conocimos, bajando la guardia. Lo que logra en uno el miedo a perder a las personas, ¿no? —. Ian tiene una situación con el alcohol... No bebe, ni una sola gota. Tenía que ayudarlo con el reto para evitar que bebiera. Así, además, yo también cumpliría con mi parte del reto... Jugábamos a la botella. Desafío o penitencia, ya sabes. Y tampoco quería beber... Hay gente extraña aquí, no creo que es un buen sitio para eso.

Su mirada, aún pegada a mí, se suaviza. No obstante, noto que su semblante evidencia lo sorprendido que está ante mi cambio de actitud hacia él. Debo admitir que una parte de mí se retuerce en fastidio ante tal expresión de satisfacción. Maldito orgullo. De todas maneras, a estas alturas, no es relevante. Porque hay otra parte de mí que quiere aprovechar la situación y deshacer por completo su molestia.

Ojitos de cachorro en acción.

—Sólo fue un reto —añado, ansiosa ante su silencio.

Andrew me analiza con tanta concentración, que, si un mosco se posara en la esclerótica de su ojo, él no reaccionaría. En acto involuntario como respuesta ante los nervios, me muerdo el labio.

—¿Andrew?

La mención de su nombre parece sacarlo del trance. Parpadea un par de veces y da dos pasos hacia mí. Me toca levantar el mentón para poder mantener el contacto visual.

—Sí... Está bien, pequeña —murmura con solemnidad. Le regalo una sonrisa dulce—. Pero me parece injusto, yo también quiero que me lamas la nariz.

¿Eh?

Mi ceño se frunce en confusión. Además, su manera de formular esa petición me resulta terrible.

—¿Cómo? ¿Así? —repito lo que hice con Ian, estirando mi lengua y tocando la punta de su nariz. Claro que me toca colocarme de puntillas debido a la diferencia de estatura.

El contacto lo hace soltar una pequeña carcajada. Sus ojos se entrecierran en consecuencia, y sus pómulos resaltan. El gesto es contagioso.

—¿En serio? ¿Todo ese numerito sólo porque querías que te lengüetee la nariz? —no puedo evitar burlarme de él.

—No —murmura con simpleza. Con rapidez, una de sus manos hace contacto con mi cintura para aprisionarme contra su cuerpo, mientras la otra sostiene con firmeza mi mentón—, en realidad lo que quiero es hacer lo que él no puede.

Entonces sus labios se abren paso a través de los míos en un apasionado beso que casi me hace perder el equilibrio, sino fuera porque el muchacho baja su otra mano hacia mi espalda baja para darme soporte. Es un contacto mucho más íntimo que el resto, y de cierta manera, posesivo también. Como nunca antes lo había hecho, se toma el tiempo de mordisquear la carne de mi boca, de permitir que su lengua realice una minuciosa exploración dentro de la cavidad. Y culmina separándose apenas un poco. Mi respiración está entrecortada, al igual que la suya. No obstante, eso no es impedimento para que dibuje una sonrisa satisfecha.

Lánzame Un Último Beso (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora