Allí estaba yo en esa habitación tan cara con dos personas desconocidas y con la bestia. Esto no es como el trio de aquella vez, no es sexo como el que tengo con Damon. Tiana estaba sirviendo unas copas de vino mientras que Matteo hablaba con Damon. Yo solo los miraba - vamos Bella, ya paso lo peor. Bueno... Creo - mi bestia caminó a mi tomando dos copas de las que le ofrecía Tiana.
- ¿te sientes bien?
- si ¿qué haremos?
- tranquila, tendrás sexo con ella y luego te voy a ofrecer a Matteo - la pareja que nos acompañaba hablaban como si nada - relájate - este tomo de la copa que tenía en la mano - ¿estás lista?
- eso creó - tome todo lo que estaba en mi copa.
- vamos a bañarnos - este se levantó y yo con él.
La habitación tenía dos baños, dos camas gigantes y un gran jacuzzi en el medio, la pareja brasilera se dio una ducha al igual que nosotros. Al salir me encontré con Tiana desnuda mientras que Matteo tomaba su trago, Damon camino conmigo hasta ellos y me quito la toalla. La chica que nos acompañaba sacó de una bolsa un arnés y con condón. Me indico que la siguiera al diván que estaba cerca de la cama blanca. Mi mente no iba al ritmo de mi cuerpo, Me acosté en el diván y allí empezó ella a besar mi cuello. Pasaba su lengua de arriba abajo haciéndose paso hasta mis senos, lamia mi pezón izquierdo mientras jugaba con el derecho. Un orgasmo salió de mí. Tocó mis pechos y luego bajo besando mi abdomen hasta llegar a mi monte de venus, estaba mojada y excitada, si días atrás me lo hubiera dicho; me estuviera riendo todavía por esta locura que no imagine hacer. La lengua de mi amiga pasaba de arriba abajo y abajo arriba, se movía en círculos. Alzaba mis caderas para que ella gozara más de mí, uno de sus dedos se deslizó por mi cavidad sexual y luego otro. Sentía mi fluido desbordarse de mí.
Mi respiración se agitaba cada segundo más rápido y mis piernas se abrían más y más como si fuera elástico. Tiana se colocó el arnés y el condón, el pene de plástico entro sin dificulta. Solté un gemido cuando empezó a moverse, a pesar de que no era hombre sabía complacer a una mujer. A lo lejos escuche la voz de Damon decir: - míranos - los mire mientras mi acompañante seguía moviéndose, su boca de vez en cuando buscaba morder mi pezón. Un orgasmo llego a mi haciendo que gritara. Damon solo sonreía, sentí cuando salió el juguete de mí. Necesitaba que la respiración volviera a su ritmo, mi bestia me hizo seña para que caminara hasta la cama, me levante con las piernas aun temblando. Cuando llegué a su lado este me beso y paso sus dedos por mi húmeda vagina y los movió en círculos, luego los sacó y los llevó a mi boca.
- abre la boca - lo miré y abrí la boca - chupa - sus dedos estaba con un sabor distinto. Un poco ácido, salado y al final algo dulce - muy bien - enrede mi lengua entre sus dedos - quiero que hagas eso en mi pene, pero no hoy - tenia ganas de hacerlo, me sentía erótica - ven - saco sus dedos de mi boca y me llevó a la cama, se sentó y me puso entre sus piernas - te voy a ofrecer - Matteo busco en la bolsa un preservativo - voy abrir tus piernas y él entrara en ti rápido y fuerte - su voz en mi oído hacia que mis fluidos salieran a chorros - lo estás haciendo muy bien - las manos de Damon abrieron mis piernas dejándome expuesta a Matteo que venía ya con el preservativo puesto.
Matteo - por fin se me cumplirá la fantasía - miro a Damon y algo se dijeron por seña, el brasilero se agacho y paso su lengua por mi clítoris, quise cerrar las piernas, pero esas manos que me sujetaban lo impedían- sabes muy bien - otra lengüetada más y se levantó - muy bien - me miro y se introdujo en mí, solté un gemido.
Damon - grita lo que quieras, y ve a Tiana - mi mirada fue directa a nuestra compañera que se estaba masturbando. Sentía lo mojando que estaba. Mientas él entraba y salía de mi sentía las manos de Damon tocar mis nalgas y una que otras veces uno de sus dedos estimulaba mi ano. Estaba excitada, ver y escuchar los gemidos de Tiana me encendía más, un orgasmo llego y más atrás llegó Matteo. Salió de mí y camino hasta su esposa, se quitó el condón y la beso, Damon me levantó poco a poco hasta dejarme parada - vamos a verlos tener sexo. Te pondrás en cuatro en la cama viendo a Tiana - hice lo que me pidió, mi amiga estaba en las mismas que yo - acomode todo mi cuerpo en la cama dejando mis caderas alzadas, Damon se acomodó detrás de mí y al mismo tiempo que lo hizo Matteo me penetro, sus estocadas eran fabulosas y rápidas. Me halo por el cabello para que viera a la otra pareja al frente. Los gritos de Tiana y los míos llenaban el lugar, orgasmo tras orgasmo recorrían mi cuerpo. Sentí el semen llenar mis entrañas cuando Damon termino. Ambos respirábamos con dificulta al igual que la otra pareja. Damon salió de mí y se levantó de la cama arrastrándome con él - vamos a ducharnos - caminamos al baño necesitaba agua fría así que sin pensarlo abrí el grifo dejando que el agua cayera en mi - ¿cómo vas?
- bien. Todo nuevo para mí - este me abrazo y se metió bajo el agua.
- tu entrega me encanta - lo bese y nos bañamos, para luego salir y vestirnos, necesita llegar a casa y descansar las piernas.
Después de una ducha y estar listos, nos despedimos de nuestros amigos, con la promesa de vernos en casa de Katty y volver a jugar. Abajo nos esperaba Luttier, lo saludé y subí al auto, aunque no quería mis ojos se cerraban. No sé cuando llegamos a la casa solo sé que me desperté de golpe y estaba en la habitación, Damon se estaba colocando su pantalón de pijama.
- ¿me cargaste? - este se giró.
- si. Ven, quítate esa ropa - me levante de la cama y me quite el vestido y las medias que era lo único que tenía puesto - gracias por la noche de hoy.
- gracia a ti por compartirla conmigo.
- de nada señora Smith - me le quede mirando.
- ¿enserio? Ya para con eso.
- tu comenzaste esto - me coloqué una camisa de él y me senté en la cama.
- igual, otra cosa. No quiero auto ni nada de eso - Damon seguía de pies.
- ¿qué tiene de malo?
- todo, de verdad y necesito tu número de cuenta - éste cerró la puerta del baño- todo esto es nuevo Damon, te gusta ser rico y poderoso, pero yo, yo solo quiero tener lo que una chica de 23 años tendría.
- te tengo una condición para que deje que me pagues el dinero de la universidad. Una chica de tu edad podría con eso.
Bella - a ver - dije mirándolo.
- deja de trabajar en el bar - sabía que me lo iba a pedir y no podía negárselo - si haces eso dejo que me pagues.
- lo haré, pero dejaras que te pague todo.
- acepto - me extendió la mano
- muy bien.
- te daré un auto de los míos - este camino hasta su lado de la cama.
- ni lo pienses.
- no es nuevo y será un préstamo. Como un regalo de compromiso - joder con la bromita del apellido.
- ¡por Dios!, ya deja lo del compromiso - Damon río a carcajadas - ese sonido llenó mi alma, era una risa divertida.
- lo haré - se acostó llevándome hasta él - duérmete ya - dijo mientras besaba mi frente.
- no quiero el auto - los ojos se me volvían a cerrar.
- hasta mañana bella - me dio un beso en la cabeza.
- hasta mañana bestia - no oí más que una risita por parte de él.
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Ni tan bella Ni tan bestia
Romancesexo explicito y mucha diversión. Dos edades distintas, dos caracteres distintos, dos personas distintas y algo en común, el deseo del uno por el otro. El un hombre frío y muy sincero, capaz de hacer que cualquier mujer haga su santa voluntad d, lo...