Después de mucho tiempo, Francesca regresa a un pequeño pueblo en el estado de Washington para vivir con su padre, Charlie Swan. A sus casi dieciocho años, espera tener un último curso de preparatoria tranquilo.
¿Será prudente la presencia de ocho v...
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Dos semanas después, Francis fue a Forks como de costumbre. Ese sábado, tenía la intención de ir a la casa de la señora Smith con su padre, pues tenían nuevas noticias sobre la desaparición del albino. Sin embargo, cuando llegaron a la casa, se hallaba completamente vacía.
Habían descubierto, por las cámaras de seguridad, que Nick llegó a altas horas de la noche totalmente desnudo y desorientado, estuvo unos minutos en su cuarto, se vistió y luego volvió a salir. La policía sospechaba que lo habían drogado y manipulado para llevárselo, pero eso no tenía mucho sentido.
Dakota y Francis se sentían muy impotentes respecto al caso. Habían pasado trece días y no había pistas. Las chicas estaban a punto de tener una crisis nerviosa.
¿Es que ese año podía ponerse peor?
Por la noche, estando Francis sola en casa, pues su padre seguía en la estación y Bella se había ido a trabajar en la tienda de los Newton, entró una llamada al teléfono fijo.
—¿Hola? —contestó.
—Hola, soy Jessica Stanley —dijo la voz del otro lado—. ¿Francis?
—Sí, Bella no está ahora —respondió—. Está en el trabajo.
—No la buscaba a ella, te buscaba a ti —admitió la chica con seguridad.
Francis no pudo ocultar su sorpresa. —¡Oh! Ah... bueno, hmmm, sí. ¿Qué necesitas, Jessica?
—Quería hablarte sobre algo —vaciló—... relacionado con Bella. Está muy extraña, bueno, siempre ha sido rara, pero últimamente es peor.
La castaña se quedó quieta, y puso atención. —¿Qué es? ¿Qué pasó?
—No sé si sabías —comenzó—, ayer salí con Bella a Port Angeles. Fuimos a ver una película.
—Ah, sí. Papá comentó algo en el desayuno.
—Bueno... Al finalizar la película decidimos ir a cenar a McDonald's, y enfrente había un bar...
Francis escuchó con más atención, no le gustaba el rumbo que tomaba la historia de Jessica.
—...había unos tipos afuera, tenían una pinta horrible si me preguntas, podían haber sido psicópatas. Y de repente, Bella estaba acercándose a ellos —su voz ya sonaba enojada—, la detuve a la mitad, pero ella se soltó. ¡Y lo hizo! Fue a hablar con esos... No sé qué diablos estaba pensando, pudieron haberle hecho algo. Te lo digo para que estés al pendiente, Francis, esa actitud de Bella no me gusta.
—No sé qué le pasará a Bella, pero estaré al pendiente. A mí tampoco me gusta eso —respondió sincera—. Gracias por decírmelo, Jessica.
Tal parecía que la Bella zombie se había ido, pero en su lugar, llegó la Bella imprudente.
