Frenesí [Completa ✔]

Capítulo 11

Deryck

Cuando llegamos a Los Ángeles hace más de un año, me imaginaba que jamás andaría por la ciudad por el compromiso en la universidad. Pero hasta el momento ha sido todo lo contrario. Puedo decir que conozco los lugares más famosos y que he ido más de una vez. Sin duda esta ciudad ha sido de mis favoritas hasta el momento.

—¿Sabes qué es lo que me gusta de estas fechas? —pregunta Pete mientras conduce al supermercado.

En esta ocasión hemos decidido ir en su auto a rellenar las gavetas de la cocina con suficiente despensa como cada viernes. Y parece que hace un mes que no compramos nada porque siempre arrasamos con todo.

—No tengo idea. ¿Qué es lo que te gusta?

—La decoración —menciona mientras señala hacia al frente—. Las personas se lucen con lo alusivo para este mes "del horror".

Es verdad. La noche de brujas está cada vez más cerca, así que es normal ver casas y algunos locales adornados con esa temática. Y sin duda mi hermano es fanático de todo eso, no por nada es su mes preferido en todo el año, además de la navidad y su cumpleaños, claro.

—Ni siquiera recordaba que solo faltan dos semanas para esa noche. No tengo la menor idea de qué hacer en ese día. Es más, ni siquiera sé en qué fecha estamos. 

—Mi querido hermano, debes de prestar atención a todos esos detalles —menciona mientras conduce—. Estoy emocionado. Aunque siendo honesto, este año Jenni y yo no llevaremos disfraces de pareja.

—¿En serio? ¿Por qué? Ustedes siempre planean algo para lucir genial en ese día.

—Porque ella y las chicas han llegado a un acuerdo de disfrazarse juntas. ¿De qué? No tengo la menor idea. Pero está bien, no siempre será así y está bien que se diviertan.

—En eso tienes toda la razón. Y ten por seguro de que será una sorpresa.

—He notado que ahora son más unidas. ¿Lo has visto, cierto? —pregunta en cuanto vemos que ya estamos por llegar al supermercado.

—Sí y esto está bien. Creo que es un efecto de...

—¿De qué? —pregunta fingiendo curiosidad, aunque ya sabe qué es lo que estaba a punto de decir.

—Ya sabes de qué.

Soltó una risita y negó. Llegamos al lugar y por suerte no hay muchas personas como pensábamos.

Antes de entrar jugamos «piedra, papel o tijera» para saber quién llevará el carrito con la despensa; Pete sacó piedra y yo tijeras, así que perdí. Lo primero que ponemos son las bebidas, y no, no hablamos de cerveza, eso va al último, nos referimos a la Coca-Cola, bebidas saborizadas y todo eso. Continuamos en el pasillo de la comida chatarra y sopas instantáneas, con aquello de que en ocasiones nos da flojera cocinar los fines de semana... bueno, yo no cocino porque puedo ocasionar un incendio. Quienes lo hacen son mi hermano y Jo.