ᴘɪʀᴀᴛᴀ 🏴‍☠️

Capítulo 33.

En la mañana Louis se encuentra con la maravillosa imagen del príncipe plácidamente dormido frente a él, envuelto entre la manta gruesa después de una noche muy controversial y abrumadora.

Louis no conoce cuál es el estado actual de Timothée, pero tampoco ha querido escabullirse para verlo a escondidas de Harry después de su pequeña conversación que tuvieron. Claro que está preocupado por la salud de Timmy, el haber crecido juntos como hermanos en el barco y haber vivido una serie de acontecimientos difíciles, los volvieron muy cercanos a pesar de que Louis intente negarlo, juntos aprendieron a sobrevivir en medio de la tormenta, aprendieron mucho de la vida en el mar juntos, y no se han separado desde entonces. Ha sido su mano derecha y su segundo al mando desde que lo proclamaron capitán del Red Leg, sólo porque Louis tenía suficiente confianza en él como para ponerlo a cargo durante su ausencia, además de ser amantes ocasionales también tenían claro sus prioridades dentro del barco, aunque últimamente Timmy parecía haberlas olvidado. Sin embargo, fue algo que él confundió, ya que Louis jamás le había dado esperanzas de ser algo más que simples amantes para divertirse en su tiempo libre, algo que Timmy por supuesto se rehusaba a aceptar.

Louis debió ponerle más atención con la llegada de Harry, sin embargo, no lo hizo, lo había echado a un lado como un objeto sin valor, importándole muy poco cuál sería su reacción, o cómo tomaría el hecho de ser desplazado por un forastero. Pero nada de eso es causa justificable para dañar a Harry de la forma que lo hizo, atentar contra su vida sin razón alguna es algo que no tiene ninguna justificación ya que las leyes piratas no defienden un ataque injustificado. Louis se encuentra muy molesto e indignado por todos los sucesos del día anterior, también se encuentra sorprendido porque no esperaba que Harry fuese capaz de actuar como lo hizo, fue un acto muy valiente, sin embargo Louis no se sintió tan orgulloso como debería sólo por tener muchas emociones encontradas.

El niño que creyó indefenso y frágil fue capaz de enfrentar a uno de sus hombres más fuertes y sanguinarios, uno que tiene sus mismas estrategias de combate. Ese chico de aspecto tierno y sumiso llenó sus manos de sangre para salvar su vida, mostrándoles a todos lo que es capaz de hacer para sobrevivir en el infierno. Louis realmente había quedado sin palabras la noche anterior al enterarse de la noticia, había cometido un error al subestimarlo, al no creer que podía llegar a defenderse por sí solo. Estaba tan equivocado, y ahora está muy arrepentido por ser la causa principal de todo aquello.

Lo ve parpadear y abrir los ojos lentamente cuando un pequeño rayo de luz ilumina su rostro angelical, entonces lo encuentra acurrucándose contra su cuerpo, arrastrándose hacia él hasta pegarse a su pecho. Y el capitán nuevamente se encuentra sin palabras, dejando de respirar por un instante antes de descubrir lo que el chico escurridizo realmente quiere de él. Un abrazo, se encuentra diciéndose a sí mismo antes de mover sus brazos para envolver el cuerpo cálido del menor y apretarlo contra él en un abrazo, soltando todo el aire que estaba reteniendo al encontrar una extraña paz en aquél acto.

—Buenos días. —Lo escucha susurrar con voz ronca. Baja la mirada para deleitarse con la mata de rizos chocolates que cubren su cabeza, y sonríe antes de dejar salir un suspiro.

—Buenos días, príncipe. —Harry se acurruca mucho más contra su pecho, amando la sensación que le provocan los brazos de Louis a su alrededor.

—¿Tienes que trabajar? —Pregunta con extraña timidez. Louis asiente, pero nota que Harry no puede verlo así que se aclara la garganta antes de responder.

—Debo hacer algunas cosas, hay espacios vacíos y con todo lo que pasó ayer debo organizar a la tripulación. —Explica con calma, todavía aferrando su cuerpo contra él.

Harry forma un puchero con sus labios, aunque el capitán es incapaz de notarlo por la posición en la que están.

—No quiero estar solo. —Louis se aparta un poco para mirarlo, notando que Harry tiene la cabeza inclinada hacia abajo, por lo tanto levanta su mentón para encontrar su mirada.