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- Si te portaras bien, no estaríamos aquí y no tendría porque estar haciéndote esto

Taehyung se encontraba sobre su cama, tragandose los quejidos por el dolor al sentir como Jungkook le curaba la herida en su cadera.

- Si no estuvieras loco, no tendrías por qué haberlo hecho para empezar -sisea al sentir el alcohol quemar su piel- arde...

- Quiero darte lecciones precioso

- Pues tú manera de enseñar es una mierda

Jungkook río bajito negando, coloco la venda sobre la herida, asegurándose de que no se moviera de su lugar, se acercó a Taehyung para besarle, solo rozando sus labios.

- No importa cuantas veces te castigue -aprieta con fuerza sobre la herida haciendo que Taehyung se queje- te gusta que lo haga y por eso sigues desobedeciendo

Kim lo miró, los oscuros ojos negros de Jungkook lo hacían sentirse de tantas formas.

- Eres un enfermo -suelta- ¿Cómo puedes creer que me gusta esto ha? Yo ni siquiera pedí estar aquí para empezar -defiende- y tú eres un sádico que piensa que haciéndome daño voy a caer rendido a sus pies, pues déjame te digo, que así solo lograrás que te odié

- ¿No lo hacías ya? -se burla alzando la ceja- bien, dicen que del odio al amor hay un solo paso, precioso y el primero ya lo diste tu al terminar con tu ficticia relación frente a tus padres

Un día antes.

- Les dirás qué te caíste

Jeon lo jalaba sin piedad por el brazo caminando rápido sin importar que Taehyung se tropezara al intentar seguirle.

- Jungkook... -solloza- no puedo...

- Si quieres que te cure la herida para que no se infecte camina -ordena jalándolo-

Dejó a Taehyung toda la noche amarrado al árbol, sin importarle en los más mínimo su dolor. No lo importó escuchar los gritos de Taehyung al alejarse de vuelta a la casa, suplicando por qué no lo dejara ahí como un jodido animal. Jungkook simplemente se metió a su auto, cerró los ojos decidido a dormir y cuando apenas el sol salía de nuevo, regreso a dónde se encontraba el roble.

Taehyung había pasado la peor noche de toda su vida, quedó sujeto de pie, las piernas las sentía adormecidas, su mano abierta aún ardía y no había parado de sangrar, el dolor en su cadera era mínimo a todo lo que sentía en su cuerpo. Se la paso llorando, juraría que lo poco que llevaba de vida paso por su cabeza ¿Qué había hecho para merecer semejante castigo?, su ansiedad y miedo no le permitieron dormir, tampoco es como que pudiera hacerlo en esa posición. Los rayos del sol comenzaban a asomarse en el horizonte, sus ojos ardían, su cabeza dolía y su boca se encontraba seca.

- No puedo caminar... me, me duele todo -a penas y podía dar un paso entre tropezones- Jungkook... -se jala entre lágrimas- ¡Que no puedo!

- No grites -gruñe con los nervios de punta-

Y antes de que Taehyung pudiera decir algo, Jungkook ya lo estaba cargando al estilo princesa caminando en dirección a su casa lo más rápido que los pies le permitían. Jungkook abrió la puerta y lo recostó sobre el sillón con sumo cuidado.

- Primeros auxilios -hablo exhausto-

- En el baño -sisiea- el espejo se abre

Jungkook rápidamente fue y vino en el mismo minuto.

- Primero la cadera -le desnuda la zona de golpe-

- Ah mierda -se queja-

La tela se había pegado a su piel gracias a la sangre seca.

Mas de lo que aposté ||KookV||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora