Mas de lo que aposté ||KookV||

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Y mientras transcurrían las tres últimas horas del día entre clase y clase, Taehyung se esforzó al máximo al intentar concentrarse en lo que sus maestros hablaban y no en la escena ridícula que había armado en la cafetería. Es conciente de que cometió un gravísimo error, uno que para su gusto era demasiado estúpido. Se encontraba ansioso imaginándose las mil y un maneras en las que Jungkook sé lo haría pagar y con los antecedentes que ya tenía a su lado; muchos escenarios se pintaron dentro de su cabeza, mismos que lograron erizar le la piel al sentir las corrientes eléctricas atravesar todo su cuerpo.

"De rodillas, manos en el piso, si gritas será uno más".

La primera vez que lo golpeó.

"Te marcare para que no se te olvide a quien perteneces".

Kim sé removió en su lugar pasando en seco a la par que apretaba su cadera; cada que observa aquella marca sobre su cuerpo, la sensación de su piel siendo abierta golpea su mente.

"Espero que estés limpio porque te voy a tragar por completo; te quiero desnudo en la cama".

Sintió como sus pezones se endurecieron ante el recuerdo, se supone que tenía que estar aterrado y no excitado, pero era imposible controlar ese deseo; Jungkook azotando su cuerpo mientras le comía el trasero a su antojo y él indefenso amarrado a la cama. Quizá ese sería su castigo favorito si no fuera por la escena en Nueva York.

"¿No dirás nada? Bien, entonces sin gritos precioso".

Las marcas eran más notorias que las primeras pues esas poco a poco se habían desvanecido, no le dolían pero lo que seguía fresco en su memoria era la manera en que se lo follo frente al espejo después de pedirle perdón. Era el vivo retrato de como se dejaba consumir por el fuego; Jungkook ensangrentado haciéndolo suyo con demencia y él dejándose envolver entre sus brazos.

La racionalidad poco a poco lo iba abandonando, porque para ese punto Taehyung ya estaba desesperado, anhelando su próximo castigo.

La última campanada del día logro sacarlo de entre sus impuros pensamientos, Taehyung se levantó de prisa caminando por los pasillos hasta la salida, no quería ver a Jungkook, no aún; porque aquello que su cuerpo le exigía a gritos, la sensatez en su cabeza le decía que era incorrecto.

- ¡Oye Taehyung, hey...!

Yoongi corría detrás de él.

- ¡Tae!

Kim al escucharlo a través de sus audífonos se detuvo, dando media vuelta para encontrarse con Yoongi.

- ¿Qué pasa? -rie al verlo agitado- Oye Yoongi, tranquilo, respira...

- Si yo -jadea exhausto- yo... dame un minuto -Taehyung asiente riendo, mientras Yoongi intentaba regularizar su respiración- Lo siento si te asuste

- Está bien... ¿Qué es lo que necesitas?

- Quería que quedáramos de acuerdo para continuar con el proyecto que tenemos asignado, ¿Crees que lo podríamos empezar hoy mismo?

- ¿Qué proyecto? -frunce el ceño confundido-

- El caso que nos asignó la señorita Sum

- Ah... Cierto, ese proyecto, ya habíamos avanzado un poco con Jimin, te lo paso para que lo leas y después podemos revisarlo juntos...

- ¿Puedes hoy en la tarde? -interrumpe-

Taehyung lo medito por unos segundos, necesitaba distraerse y que mejor excusa que una tarea para quitarse esos pensamientos locos de la cabeza.