El Harén de Renjun. [omegaverse]

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Últimamente el príncipe Guanlin no le ha dejado en paz a Renjun, por qué según el alfa, Renjun es interesante y jamás había conocido a un omega dominante como lo es el rey.

Conoció a los alfas de Renjun, eso obviamente no había estado en los planes del rey omega. Renjun admite que el alfa tiene actitud agradable,  pero la desconfianza es mayor. Lo extraño es que Guanlin y Mark se conocían y se hablan como si fueran amigos de toda la vida.

Entonces mandó a llamar a Mark, para que hablen un momento a solas.

— mi rey — dice Mark al entrar en el despacho real y se acerca para darle un casto beso en los labios a Renjun.

— fresita — Renjun sonrió. Si, Renjun le gusta compararlos con alguna comida o lo que sea según su color de cabello. — Siéntate por favor, tengo que hablar de algo contigo.

— Qué sucede? — pregunta obedeciendo al rey.

— El príncipe Guanlin... ¿Hace cuánto que lo conoces?. Quiero detalles.

—Desde que somos niños — respondió Mark. — Él fue al reino Lee de visita con su padre, que tenían asuntos que atender con el rey. Mientras nuestro padres hablaban jugábamos juntos y nos contábamos todo, después solía venir él solo al reino Lee cuando podía. Un día.. el padre de él estaba enojado con el mío, no sé por qué, escuché algo de "te aliaste con alguien que me quito mi felicidad" no sé a quién se refería y desde ese día Guanlin no volvió más y pensé que jamás lo iba a volver a ver, pero me impresionó que estuviera aquí de visita.

Renjun le pareció extraño, no se iba a meter en problemas ajenos por qué no es de su incumbencia.

— entiendo.. es por eso que se alegraron al verse — comentó Renjun y Mark asintió — y... ¿Cómo es él?.

— Es muy bueno. Es alegre, ayuda a los demás.. cuando éramos niños y yo me raspaba la pierna por una caída el lo sanaba usando magia. — comentó — También es un poco distraído, se queda fascinado por algo insignificante — Renjun recordó cuando Guanlin había mirado el pisapapeles como si fuera algo de otro mundo — Mhm.. hace bromas pesadas para luego disculparse si ofendió o hirió de alguna manera. Pero a simple vista parece que no ha madurado, bueno, quizás si, pero su lado insistente y su actitud de niño lo sigue teniendo.

«Entonces por qué tengo ese presentimiento?» pensó Renjun. Lo cierto era que ese presentimiento no viene de él, de su persona. Si no algo o alguien cercano a él, y eso lo desconcerta demasiado.

— ¿Por qué pregunta por el príncipe Guanlin?, está interesado en él. — habla nuevamente Mark haciendo que salga de sus pensamientos.

— No.. solo es curiosidad, es que debo saber con quién se relacionan mis alfas, eso es todo. — respondió. Era una excusa, aunque por una parte era verdad.

— Entiendo.. No te preocupes, Guanlin es inofensivo.

— Voy a creerte — era mentira, puede que con los años sin verse haya cambiado —  Eso es todo, si quieres puedes irte, voy a hacer algo — dice mientras abre los cajones en busca de unos papeles.

— Está bien su majestad, lo dejaré hacer sus obligaciones con tranquilidad — Mark se levanta para luego salir del lugar, no sin antes darle un beso a Renjun.

Horas más tarde Renjun pensaba en Taeil, le dijo que iba a venir al palacio para quedarse cuando le pongan la corona y paso más de un mes de aquello y aún no vuelve. El rey estaba preocupado por él, claro, es como su hermano mayor.
Pensaba cosas trágicas del por qué aún Taeil no volvía, si le pasó algo malo o sí tuvo un accidente, entre otras cosas.

— Su majestad, Taeil volvió — anunció Yangyang que había entrado no sin antes golpear la puerta de antemano.

Renjun lo miró sorprendido, justo cuando había estado pensando en él.
— En dónde está?.

Yangyang se hace a un lado y ahí pudo ver a alguien entrar.
— Taeil! — Renjun sonríe y se levanta para darle un abrazo.

— Renjun — el mayor corresponde el abrazo — o debería decir ahora: su majestad.

— Dijiste que vendrías en mi coronación — le recordó cuando se separaron del abrazo.

— Si, lo siento, tuve algunos problemas por el camino. Pero lo importante es que ya estoy aquí — Taeil sonrió — estaré presente en la boda.

Renjun asintió.
— Estás cansado? — le preguntó.

— Así es, su majestad.

— Entonces te dejaré descansar, luego me cuentas lo que has estado haciendo fuera del pueblo — Taeil asintió prometiéndole que así sería.

Taeil salió del despacho y justo cuando Renjun iba a hacer algunos deberes pendientes, ingresa Guanlin. El omega suspira.

— Su majestad, está siendo una hermosa tarde, ¿Quiere tomar té conmigo?. — preguntó el príncipe alfa, Renjun se iba a negar pero Guanlin continuo — Dale, di qué si!, ¡Di que sí!~

«su lado insistente y su actitud de niño lo sigue teniendo»  Renjun recordó las palabras de Mark.

— Ni con mis alfas paso tanto tiempo como la paso contigo — le comenta Renjun.

— Su majestad~, yo solo quiero pasar mucho tiempo con usted antes de volver nuevamente a mi pueblo.

— Eres un consentido — Renjun dijo para luego negar con la cabeza — ¿Por qué quieres pasar mucho tiempo conmigo antes de irte?.

— Ya le dije antes. Que nunca había conocido a un omega dominante como lo es usted y me pareces muy interesante. No ese tipo de interés — aclaró. — Solo quiero ser su amigo.

— Yo no quiero ser tu amigo.

— Su majestad~.

Yangyang que se encontraba ahí escuchando la conversación de Renjun y Guanlin le dan ganas de reír pero no podía hacerlo, le está costando mantener una expresión neutra.

— Aún no te perdono por lo que me has hecho.

— Pero ya me disculpé! — chilló — solo fue una pequeña prueba.

Renjun niega con la cabeza, si no le decía una respuesta positiva a Guanlin entonces no le iba a dejar en paz.

— Está bien, vamos a tomar té juntos. — aceptó y soltó un gran suspiró.

— Yeeeeiii. — celebró para luego salir del despacho del rey.

— No crees que deberías estar lejos de él — preguntó Yangyang mientras Renjun ordenaba sus cosas. — lo digo por el presentimiento que tienes por él.

— Al enemigo hay que tenerlo cerca.. para saber qué es lo que exactamente trama — le recuerda — ¡Pero su actitud de niño caprichoso me confunde!. No parece ser alguien malo.

— Realmente no parece malo — apoya Yangyang.

Como lo había prometido Renjun, fue a pasar la tarde con el príncipe Guanlin que le hablaba acerca de todo un poco, el alfa no tenía botón de apagado una vez que le comenta cosas. A Renjun no le molestaba, gracias a eso se olvida por un momento que él es el "enemigo" y disfruta de su compañía.