Leer bajó su propia responsabilidad+18
Perdón. Si no es muy bueno realmente me siento un poco afectada por la situación que ya les comenté
🦁💌🎆
La cama crujió. Pasos suaves sobre suelo duro. Una puerta que se abre y se cierra.
Cinco segundos, cinco minutos o cinco horas después, George despertó de su sueño. No quería moverse, pero ese poco de perturbación ya despertó el resto de él. Abrió los párpados como si se los hubieran sellado con pegamento. Con una visión de vidrio empañado, observó su entorno.
No su habitación.
George se sentó con un gemido y notó que su garganta estaba un poco áspera. Solo entonces se dio cuenta de que estaba desnudo. Su entrepierna estaba pegajosa, al igual que las sábanas arrugadas que tenían puntos endurecidos aquí y allá.
Tuve sexo, está bien.
Un suave ronquido lo hizo girar para ver a Fred, también desnudo, tirado al otro lado de la cama con baba saliendo de su boca.
Por Merlín, Fred.
Nada de esto era algo que George no hubiera visto antes, así que continuó investigando la habitación y su mente en busca de pistas.
Me emborraché y tuve sexo, ¿de acuerdo?
Se arrastró para ponerse de pie, tambaleándose como si acabara de recibir un puñetazo en la cara.
Conversación coqueta con una desconocida de sonrisa tortuosa. Un hermoso cuerpo frotándose contra él y Fred. Piel adictiva. Besos con sabor a cerveza de mantequilla con delicioso besos en las escaleras de hogwarts y un diluvio de placer que aumentaba a medida que avanzaba la noche...
George se puso sus calzoncillos. Había una cantidad no identificable de condones usados y sus envoltorios, una botella vacía de lubricante y vibradora rosa.
-¡Oh, joder, me vengo, me vengo--
-joder gimes tan caliente, eh. ¿No estás de acuerdo, Fred?-
Se oyó el sonido de un cinturón que se desabrochaba y que se bajaba la cremallera. -Oh sí. Es una pena que no lo oigamos mucho en un segundo…-
Cuando la ropa volvió a ponerse y la mente de George se agudizó, recordó lo que pasó.
Estábamos en una fiesta para celebrar un partido de quidditch y las cosas se pusieron mucho más interesantes cuando una chica saltó a bailar a una de las mesas de la sala común. Estuvo tan bien que todos la vitorearon para que se quedara durante el resto del set, y lo hizo. Fred entabló una conversación con ella, y finalmente fuimos a otro bar a tomar unas copas antes de que eso se convirtiera en un montón de besos...
Un graznido grave devolvió la atención de George al presente. Fred se rascaba la cabeza y se apoyaba en los codos.-Uhhh, ¿qué? Esto parece un poco femenino para ser nuestra habitación-
-Es porque no lo es, imbécil. ¿Recuerdas anoche?-
Los ojos marrones se cerraron de golpe y luego se abrieron de nuevo. -Recuerdo… Una voz increíble. Tetas realmente bonitas, una de las mejores mamadas de mi vida, y corriéndome varias veces-
-Bueno, lo tomaré como un cumplido-
George y Fred giraron la cabeza hacia la voz burlona.
Estabas parado junto a la puerta completamente vestida y luciendo esa misma sonrisa cautivadora que los cautivó en primer lugar. Las ondas en tu cabello se habían aflojado, y una nueva capa de lápiz labial y delineador de ojos era todo lo que quedaba del maquillaje de la noche anterior, pero los chicos encontraron un atractivo extraño e íntimo en ese despeinado casual. Hizo retroceder la imaginación de ambos a horas anteriores, cuando los enfrentabas al mismo tiempo, dando y recibiendo éxtasis en ambos extremos.