Pedido especial de Moon-Malfoy espero te guste
LEER BAJO SU PROPIA RESPONSABILIDAD ☺️
George se sentó en su escritorio, una gran pieza de caoba que presumía de su sofisticación, mientras cuidaba un vaso de whisky de fuego en la mano. Sus largas piernas estaban cruzadas mientras se recostaba en su silla de cuero. El traje que vestía era impecable, enfatizando el nivel de rico que era. George era orgullo, poder y riqueza. Era magnificencia, encanto y dominio.Puesto tener todo lo que tenía después de dónde venía era algo de admirar.
Exactamente lo contrario de lo que eras en este mismo momento.
A diferencia de su gran silla, tú estabas sentado en una pequeña silla de madera. Corrección: estabas atado en una pequeña silla de madera. Tus tobillos estaban atados a las patas de la silla, la cuerda te picaba la piel. Tus brazos estaban atados detrás del respaldo de la silla, empujando tus senos hacia afuera. Tu falda negra se ensanchaba alrededor de tus muslos y tu camisa estaba desabrochada de manera casi inapropiada.
George te observó como un halcón mientras tomaba un sorbo de su bebida. El tintineo del hielo contra el cristal era el único sonido en la habitación. Tus labios estaban apretados en una línea apretada y sabías que era mejor mantenerlos así o de lo contrario te meterían una mordaza en la boca. Finalmente, George se humedeció los labios y tarareó.
-¿Sabes por qué estás aquí?-preguntó George, haciendo girar su bebida en el vaso. Puedes hablar.
-No-, respondiste honestamente. -Me pediste que viniera aquí-.
-Porque por alguna razón tu te resistes a mi- resopló George. -Te dije que vinieras aquí. Tú escuchaste que te hizo cambiar de opinión nena -
-Que sentido tenia darte lo que quieres fácil no te gustan los retos además sabes que siempre lo haré -, dijiste.
George levantó una ceja y asintió, dejando su vaso sobre la mesa. Se puso de pie en toda su altura, elevándose sobre ti mientras cruzaba los brazos sobre el pecho.
-¿Y por qué me escuchas, nena?-George ronroneó, inclinando la cabeza hacia un lado. Sus hermosos ojos escanearon tu cuerpo, empapándose de verte. Te moviste nerviosamente en la silla mientras tu coño se humedecía bajo su examen.
-Porque te pertenezco Daddy-, susurraste.
-Muy bien-, te aplaudió George con una sonrisa aguda.
Usted tenía razón. Él te poseyó. Pero él te poseía porque te amaba. George Weasley, Dueño de sortilegios Weasley, era uno de los hombre más ricos del mundo mágico. Nadie sabía exactamente lo que hizo, e incluso usted todavía no estaba seguro, pero le llamó la atención hace aproximadamente un año. Usted era camarera en un elegante restaurante y estaba sirviendo su mesa cuando él y algunos hombres bien vestidos entraron a cenar. Te estuvo mirando todo el tiempo que trabajaste en la mesa y cuando su grupo terminó, te dejó una propina especialmente grande. Apareció de nuevo la noche siguiente, te invitó a un trago y rápidamente te folló en la parte trasera del restaurante.
Después de eso, George comenzó a pagarle por su "empeño" ya fueran regalos o otras cosa. Podía ver que a pesar de que eras camarera en un establecimiento tan lujoso, todavía estabas tratando de llegar a fin de mes. Te Georgeó bajo su ala y te ofreció pago a cambio de cuidado. Era extraño llamar a este hombre rico tu sugar daddy, pero eso era lo que era. Nunca esperó que se convirtiera en algo más, hasta que lo hizo. George te había llevado de viaje a su casa junto a la playa y después de amarrarte y follarte en el porche que se extendía sobre el océano, te dijo que se estaba enamorando de ti. Fue algo bueno, considerando que te enamoraste de él hace mucho tiempo aunque al principio fue aterrador un poco sentías que te vigilaba y era cierto eras una obsesión para george.