VAN HELSING. Legacy.

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Synphony acababa de llegar con los legados cuando cae abruptamente al suelo. Los legados la acostaron en una cama improvisada de hojas y ramas. Mientras que habían puesto a Eusthas recargado en un árbol.

Los minutos se volvieron horas, y en un parpadeo había pasado un día y medio.
Hasta que el primero en despertar fue Eusthas.

A las horas siguientes Synphony despertó.
Pero se sentía extraña. Se sentía vacía.
Su pecho le dolía.

Los legados la vieron y pronto se acercaron a ella rodeándola.

— cuantas horas me desmayé?— se agarraba su cabeza.

—Señora... ha pasado más de un día.— dice el legado del agua.

Al escuchar eso Synphony se incorpora rápido.

— imposible! No pude haberme quedado en estado de sueño por tanto tiempo!— la toma por los hombros. — y los demás Creadores ya volvieron?— los mira a todos.

— no. No han vuelto. Pensé que estarían aquí desde hace mucho. Pero solo estamos aquí con el Creador más inepto de todos.— dice una voz varonil, era el legado del creador de la tierra.

— Cállate Bladimir.— le dice Eusthas con voz firme.

— es la verdad Eusthas. Ella no tuvo un legado y ni lo tendrá. Hemos estado aquí cuidándola en lugar que ella nos cuide a nosotros! MÍRATE Y MÍRANOS! y dices que eres el más fuerte? Esto apesta y saben que... YO ME LARGO!—

Eusthas se enfurece y se avienta contra Bladimir.
—retráctate. Pídele disculpas... AHORA!—.

Y empiezan una pelea entre los dos en el suelo.

— YA BASTA!— dice enojada Synphony.

— son unos perdedores! SON UNOS PERDEDORES! TODOS VAMOS A MORIR ALGUN DÍA YA VERÁN ESAS COSAS NOS CAZARÁN COMO ANIMALES!—estaba histérico. — yo me largo de este lugar. Los que quieran síganme... o quédense con ella. A ver si los protege.— se da la media vuelta y se va.
El legado del aire lo mira y luego mira a los demás, y se marca tras él.
A los pocos segundos el legado del trueno les sigue.
Y así después de ver cómo se alejaban, Eusthas es el primero en hablar.

— puedes irte si lo deseas.— mira a Lia.
— no. Mi maestra me dijo que siempre este con Synphony.—
—eso mismo me dijeron a mi—.

— pero son libres de irse. Soy muy cobarde como para detenerlos. Y soy una inútil que no pude acabar con un monstruo que estaba frente a mi.— se cubre su cara— todo porque sentí confusión, los dos legados se miran extrañados, no sabía lo que decía.

— señ... Ama Synphony.— Lia le quita las manos del rostro, toma un pañuelo que tenía escondido, era lo único que resaltaba de limpio. Y después seca sus lágrimas.

Después de unos minutos toma postura.
— iré al campo de batalla. Quédense aquí—.

Pero Eusthas la detiene.
—no. Iremos con usted. Le juramos a nuestros Creadores que estaríamos contigo.—

Synphony los mira y asiente.
— no se separen de mi ok.—

Abre un portal ha donde estaba el campo de batalla y quedan completamente en shock.

Era todo desolado. Una nube inmensa daba vueltas en remolino en el cielo, la nube era negra y llovía cenizas volcánica.
Había rocas por todos lados y grandes grietas. El escenario era desolador.

Synphony cae de rodilla y grita desgarradoramente
— NOOOOOO! NO NO NO NOOOOOO!—

Lia y Eusthas se miran. Lia abraza a Eusthas. — ya no están. — decía con voz entrecortada.

Se separan y Eusthas corre hacia Synphony cuando ve que se empieza a golpear la frente contra el suelo.

— NO! Alto!—. La levanta y luego Lia le ayuda.

— es mi culpa. Yo y mi debilidad. Me he quedado sola. Sola.— sus lágrimas corrían por sus mejillas.

Lia la consolaba mientras Eusthas las miraba desde arriba. Camina un poco y les da la espalda.

Lia se levanta y se acerca a Eusthas.
— y ahora que hacemos?! No está bien. Está desorientada y no puede con la carga de sus acciones.—

—ya estoy arto.— dice en voz baja. — YA ESTOY ARTOOOO! ESTO APESTA!— Lia se separa de él algo asustada.

Synphony lo mira sorprendida.

— hagamos una promesa Lia. Prometámosle a Synphony que vengaremos a quienes nos enseñaron. Que pase lo que pase si encontramos a esos monstruos los acabaremos. Prometámoslo. —.

— lo prometo.—

Synphony los observa confundida.
Primero camina Lia hasta ella.
Se inclina y empieza a decir.

— Synphony. Yo como el legado del agua. Lia Yamagawa prometo seguir con las enseñanzas que me ha dejado mi Creador.
Y mis futuras generaciones nunca olvidarán lo qué pasó aquí— termina y se levanta.

Luego Eusthas se voltea y camina hacia ella.
Synphony cree ver el reflejo de Fhires en él.
Pero a diferencia de Lia no se arodilla.

Eusthas y Synphony se miran fijamente.

— mírame.— y se toca el pecho y se hace unos pasos hacia atrás.—

— YO TE JURO... QUE TODO LO QUE PASÓ AQUÍ... TODO. NO SERÁ EN VANO! YO SEGUIRÉ EL LEGADO QUE MI CREADOR ME ENSEÑO. ACABARÉ CON TODOS ESAS CRIATURAS Y ESOS ASQUEROSOS MONSTRUOS QUE AÚN SIGUEN ALLÁ AFUERA. Y MI DESCENDENCIA SEGUIRÁ LAS ENSEÑANZAS... LO JURO!— dice en voz alta. Luego toma su daga y se hace una cortada en la mano izquierda y sigue su juramento.

Esta vez lo grita con ira y euforia.
— CON ESTE JURAMENTO DE SANGRE.
JURO QUE TODOS MORIRÁN. LOS ACABARÉ A CADA UNO. JURO QUE MI LEGADO TRASCENDERÁ!
EL LEGADO VAN HELSING TRASCENDERÁ!— dice mientras mantiene su puño escurriendo en sangre.
Y su mirada de ira y odio se refleja en sus ojos.