En el momento que Rudolph li indicó nos detuvimos y agachamos para escondernos en la hierba alta, allí, una criatura, similar a un hombre lagarto de tres metros de altura y con una piel que parecía cubierta de pequeñas rocas en vez de escamas pasaba caminando, ante esto Kyle asintió.
-Sanya llamarás su atención con provocar, Rudolph y Sarah te cubrirán la espalda, mientras, ¿Marcos cierto? ¿Puedo confiarte en que guíes a Gladys usando sigilo hacia su espalda, desde allí ella podrá encontrar un sitio para dar la estocada de gracia, si las cosas se ponen complicadas yo los cubriré. -En ese momento todos asintieron al unísono y antes de darme cuenta la vanguardia del equipo ya se había puesto en marcha, Llamando la atención con un ritmo de golpes en el escudo que atrajo el lagarto, mientras yo comenzaba a caminar agachado con la muchacha de los cuchillos siguiéndome, era extraño, puesto que de alguna forma que no entendía me movía de cobertura en cobertura con perfecta sincronía, de tal forma que jamás quedaba del todo expuesto. Mientras la batalla se intensificaba y la dama del escudo era obligada a retroceder, nosotros alcanzábamos su espalda, sin perder un segundo Gladys sacó sus cuchillas de colmillo grandes (su hoja por si sola era del tamaño de mi palma) y corrió por la espalda del animal, provocando un corte y un río de sangre que la bestia acompañó de un grito de dolor antes de caer.
-Gran trabajo. -Dijo Sarah mientras chocaban puños con la asesina.
-Piel de lagarto gigante, 12 garras largas, 20 colmillos y una cola de carne... definitivamente es un buen botín. -Dijo Sonriente Kyle.
-Pero vamos a necesitar un poco más para cubrir la cuota de hoy. -El arquero asintió sonriente.
-Claro, después de todo, creo que nuestro amigo querrá recuperar esa moneda de oro invertida. -Tras aquello pasamos cazando unas dos horas más, un grupo de hormigas del tamaño de un perro pequeño fue el siguiente, esta vez, Kyle y yo los derribamos a la distancia con ataques a la cabeza, también derribé un pájaro que por ahí andaba para ver si conseguíamos un extra, pensé por un momento en vender mis mercancías en la misma tienda, pero no quiero imaginar lo que ese tipo Brendtan podría hacer de conseguirlas. Así estuve durante las siguientes tres semanas.
-¡Salud! -Gritó Rudolph mientras bebíamos una cerveza en el pueblo, tal como dije, hace tres semanas me había unido a este equipo, aunque no podía evitar pensar en la aldea todavía.
-Voy a irme a dormir. -Dije tras beber la cerveza frente a mí. Durante este tiempo usé la mayoría de las cosas que tenía guardadas con ellos, aunque fue algo complicado de hacerles entenderlas al principio, pudieron darle buen uso, aunque claro, les hice prometer que no se lo venderían a Brendtan. En ese tiempo descubrí algunas cosas, como que Kyle y Sarah son pareja al igual que Rudolph y Sanya, lo que hacía que Gladys estuviera agradecida con tenerme cerca ya que la hacía sentir que no era la tercera rueda. También que la tienda de aventuras (así se llama al pseudo gremio donde vendemos nuestras cosas)utiliza personas con el talento vendedor para que no pueda intentar obtener precios más altos e incluso escuché que la campaña del imperio ha estado avanzando de forma favorable. Aunque ya pasaron tres meses, realmente no puedo evitar pensar en la tienda y las chicas ¿Habrán seguido con sus vidas? ¿Cómo estará la tienda? Eran preguntas que no me dejaban dormir del todo en las noches. Mientras divagaba en mis pensamientos alguien llamó a mi puerta.
-Soy Gladys. -Dijo la voz femenina.
-Está abierto. -La muchacha entró y se sentó en la cama.
-Los muchachos ya se fueron a sus cuartos y por la mirada que tenías pensé que podría estar pasándote algo. -Traté de sonreír como pude.
-No es nada, sólo me puse algo sentimental.
-¿Seguro no estás molesto por lo del otro día? -Negué con la cabeza.
-La verdad es que tu invitación a salir me hizo bastante feliz, es solo que... hasta hace poco estuve en una relación bastante seria y aún me cuesta pasar página. -La chica bajó la cabeza.
-Entiendo... si quieres hablar de ello... -Pero de pronto una columna de luz se manifestó frente a nosotros, en ese momento, la diosa invocadora apareció.
-Hasta que por fin te encuentro Marcos...
