Jack—Realmente lo ama ¿Cierto?
Ros veía la bahía con una mezcla de tristeza y confusión.
—Sí. Y él a ella.
Ambos guardamos silencio viendo a las personas irse del muelle a medida que el sol cae sobre las aguas del Sound.
—No me lo perdonará—su voz se quebró—. No se lo perdonará nunca.
—Nada me hará cambiar de parecer—insisto.
La mirada de Ros es una súplica en silencio, un intento para disuadirme.
—Jack...
—Se lo debo, Ros.
Su expresión compungida cambió por un gesto cargado de ira.
—Debería haber otra alternativa.
—Escuchaste lo que dijeron los médicos.
Esta mañana en el consultorio del doctor Kavanagh Ros le ha rogado para que encuentre otra solución. Pero obtuvo la misma respuesta que me han dado desde hace meses.
—Se agotaron mis opciones—murmuro frustrado.
Derrotada cayó en la banca junto a mi. Dejo sus lágrimas correr recostando su cabeza sobre mi hombro. Es la primera vez que la veo realmente perdida y es así cómo he estado los últimos meses.
—¿Sabes?—susurró mientras lloraba—. Nunca me has hablado de cómo se conocieron.
—No hablamos de eso, en especial él.
—Para ser honestos Christian no habla de nada excepto cuando está preocupado por ti.
—¿Habla de mí contigo?
—No se porqué te sorprende. Desde que supo de su enfermedad su única prioridad has sido tú—dirige su vista hacía los barcos—Siempre has sido tú, Jack.
Mami volverá.
Mami volverá.
Pronto estaré en casa. Mami y papi también estarán.
Me cubro con la sábana igual que los demás niños. Todos duermen menos el niño de ojos grises que está junto a la ventana. Me ve fijamente, me ve llorando. Cierro mis ojos para que ya no me vea.
Quiero volver con mami. Ella dijo que volvería por mí.
Solo debo esperar. Los demás niños también están esperando.
—No llores, pequeño.
Alguien toca mi cabeza suavemente.
—Quiero ver a mami.
—Ella volverá pronto.
Bajo mi sábana y veo a un niño a mi lado. Es el niño de ojos grises, sus ojos brillan como el metal.
—¿Volveré con mami?
—Sí. Mientras tanto te cuidaré—agarra la punta de mi sábana para limpiar mi rostro—. Yo seré tu amigo.
—¿Mi amigo?
—Sí. Ahora debes venir conmigo.
—¿Por qué?
— Debes darte prisa—me extiende su mano, pero yo me alejo.
—No quiero.
—Vamos, no voy a lastimarte.
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En Contra del Tiempo
FanfictionSu tiempo juntos se volvió como una cuenta regresiva y temen que aquella terrible noticia finalmente se cumpla. Ana y Christian saben que el tiempo es lo mas valioso por eso prometen amarse hasta el final de sus días.