Legolas golpeó la mesa con su puño, estaba molesto.
Ocho, ocho meses sin su esposa, ocho meses llenos de dolor, el ver como le creció la pancita a su esposa y ella no pudo verlo.
-¿¡Es que como carajo !? -preguntó.
-Calmate Legolas -le pidió Elí.
-Tu no tienes derecho a pedirme que me calme -recalcó molestó- es de mi esposa y mi hijo de los que hablamos, no dejare que le quiten la vida a ninguno de los dos.
-Nadie a dicho que así será -respondió tranquilamente la joven.
-Mas vale que asi sea -su mirada era penetrante, ardia en molestia, se volteó y azotó la puerta al salir, unos pasos femeninos le siguieron.
Aquella joven habia dicho que si la princesa no despertaba para el dia del parto, corría riesgo la vida de ella y el o la bebé.
-Legolas, príncipe Legolas -la joven le llamó repentinamente mientras le seguia pero legolas no se detuvo- Irnîn me -este se detuvo rápidamente y volteó.
-No vuelvas a llamarme asi, solo mi esposa puede hacerlo -exclamó serenamente.
-Entonces convierteme en tu esposa -la joven se colgó del cuello del príncipe y le atrajo para besarlo, el corazón de la joven latió con fuerza una vez estuvieron a escasos centímetros.
-No -dijo firme- yo amo a Gîlthiel, solo a ella- y se alejó de la joven.
Dió unos cuantos pasos mas y abrió la puerta de la habitación donde estaba Gîlthiel.
Se acercó a ella y deslizó un dedo por su mejilla.
-Yo no creo que nuestro heredero te tenga así -suspiró y la observó.
La tomó en brazos y se sentó sobre la cama con ella asi, coloco su mano en la parte posterior del cuello de su dama y se acercó juntando así su frente.
-Ya no se que mas hacer para traerte de vuelta -beso su frente y seguido de ello abrazo el cuerpo de su esposa.
-Legolas -susurró con ternura, este se emocionó muchisimo y lentamente la alejó, pero sus ilusiones se fueron al ver que aún mantenia sus ojos cerrados.
La dejó suavemente sobre la almohada y una vez su mano se alejó de cuello de su esposa algo llamo su atención.
Volvió a tomarla y la inclinó hacia delante buscando ver la parte posterior de su cuello removió el cabello de su esposa, ahí lo vio, un sello y no uno cualquiera, un sello maldito, este estaba dibujado en la piel de ella.
La dejó sobre la almohada de nuevo y la cubrió, enseguida salió de la habitación.
-No dejes que nadie mas pase a verla -pidió a Orión quien recién habia llegado hacer su turno.
Este reverenció, Legolas se alejó apresurado y buscó a su padre.
Minutos después se encontró reunido con el, la abuela de su esposa y el rey de Lorien.
-Esta bajo un hechizo, una maldición -elevó su mano dejando ver la sangre seca en su palma.
Los tres presentes fruncieron el seño en señal de molestia.
-Mi pobre nieta -la señora se alteró.
-¿Quien? -preguntó Elí completamente molesto.
-No lo se -respondió Legolas con su mirada perdida.
-Pero pronto lo sabremos -exclamó el rey Thraundil.
Seguido de ello unos pasos hicieron eco en la habitación, alguien los escucho y se alejó corriendo.
....
-Nenîa -dijo el mago- podría ayudar, tengo entendido que la Reyna Galadriel lo dejó ocultó en Lorien.
-Es verdad -exclamó Elí con sorpresa- hay un pergamino en la biblioteca, escrito por ella, dice que le dejó varios recuerdos en el lugar mas preciado para Gîlthiel, y también hay otro del rey Celeborn y dice lo mismo.
Legolas se mantuvo pensativo por unos segundos.
Caminaba por las blancas calles de Minas Tirith, el sol yacía listo para desaparecer, las calles estaban casi vacias, luego de la batalla donde la princesa Eowyn derrotó al rey brujo y el rey Theoden falleció, Legolas decidio tomarse un momento a solas.
Pero alguien impactó con el.
-Perdona Legolas -se disculpó Gîlthiel.
-No te preocupes -sonrió y acercó su dedo a la barbilla de ella- tienes, tienes algo aquí.
Después de platicar un rato ambos subieron al salon principal, pero los guardias empezaron a perseguirlos, fue de las primeras veces que Legolas río estando con ella.
Finamente se habian colado a un salón vacio con un gigantesco ventanal, allí yacian ambos tirados en el piso uno junto al otro, observandose.
-Luego de esta guerra, si sobrevivimos me gustaría llevarte a Lorien y mostrarte un lugar muy especial para mi -Legolas sonrió.
-Tengo otros planes yo quisiera que tu.. -se detuvo y suspiró con pesadez- olvidalo, ¿Que es ese lugar? ¿Como es?.
-Es un árbol oculto por lianas, el árbol mas alto y frondoso, dentro de el un hermoso salón, con mucha luz de estrellas.
-Legolas, Legolas -empezó a escuchar una voz lejana mientras su recuerdo se desvanecia- Legolas -escuchó claramente- ¿Estas bien?.
-El árbol mas alto y frondoso, rodeado por inmensas lianas -recitó recordando las palabras de su esposa.
-¿Que? -preguntó Elí y segundos después reaccionó- su escondite -exclamó- partire enseguida.
»......
-Empiezo a perder la esperanza -comentó la abuela de Gîlthiel.
-No lo haga, se que ha pasado una semana desde que ella porta a Nenîa y no hemos visto resultados, se que pronto los tendremos -le ánimo el rey Thraundil.
La señora asintió y mientras ella y el rey comían frutas, el príncipe caminó hacia el cuarto donde dormia junto a su esposa.
Grande fue su sorpresa al ver a Gîlthiel sentada en la cama, se cubría con las mantas, de su pecho hacia abajo y se encontraba hipeando debido al llanto en el que se encontraba.
-Estoy.. -intentó decir, pero el llanto le impedía hablar, Legolas se acercó y se sentó frente a ella, le sujetó las manos y limpió sus lagrimas con su dedo- estoy embarazada y .. -siguió llorando, los labios de Legolas estaban curvados demostrando que su corazón se rompia al verla asi- y me perdí de ver como crecía mi pancita.
-Amor, lo importante es que volviste mi vida y ahora, podrás disfrutar de seguir viendolo crecer -le depositó un beso en su frente y luego la abrazó- en un mes mas podremos ver conocerlo o conocerla.
Ella asintió mientras se aferraba mas a su príncipe..
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ELVES
FanficBasada en la trilogía de El Hobbit y El señor de los anillos : ELVES -En Edición -