Adrián XIV

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Hay una creencia cristiana que decía, que el ángel de la guarda o ángel custodio es el ángel al que Dios da la misión de proteger, guardar y guiar a una persona durante su vida en la tierra.

¿Y si ella había llegado para protegerme?

¿Y si ella estaba guardándome para no morir?

¿Y si ella me estaba guiando a no caer?

Lo estoy sufriendo solo, como siempre me he inclinado a hacer. Pero desde que su mirada chochó con la mía, no me importaba tener su compañía.

A veces pensaba más de lo que debía, y las inseguridades me carcomían la cabeza. Y nunca llegaba a creer que la vida iba a ser tan buena conmigo para hacerme eso. Para traerme un ángel que me salvaría.

Nada de todo esto debía de haber pasado.

No debí de haberme vuelto a enamorar.

Porque sabía que iba a caer profundo.

Tanto que de nuevo, me iba a volver irreconocible.

Encendí otro cigarro y a los minutos me eché a dormir hasta la noche siguiente.

Lo siento.

La ecuación de LoboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora