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Kakashi había sido advertido, le habían dicho que en Konoha se encontraba la Mizukage de Kirigakure en busca de un pretendiente. Camino hasta la academia ninja sin perder la calma, dentro de las instalaciones se dirigió hasta el aula donde lo habían citado, abrió la puerta, era aquel aula que tenia instalado un espejo espía, Kakashi supuso que del otro lado estaría La Godaime Mizukage y compañía.
—Llegas tarde. —le regañó Anko entregándole una hoja de papel, que era el mismo examen que todos iban a presentar.
—Hum... es que me quede dormido. —se excusó tranquilo.
Kakashi tomó asiento cerca de Yamato, habían varios shinobis allí, seis para ser más precisos, a todos los conocía, uno era Sai, otro Kiba Inuzuka y dos hombres del clan Hyuga que conoció en la cuarta guerra ninja, Hatake pensó que si la mujer se dejaba llevar por la apariencia física, los dos Hyuga serian los primeros en elegir.
Pero si tenían que aprobar ese examen, eso quería decir que no todo era belleza física como le había advertido su informante. Hatake leyó las preguntas, todas eran referentes a política, sobre como actuarias en diferentes situaciones, Kakashi se esforzó para hacer notar en cada respuesta que pondría a Konoha antes cualquier otro país.
El albino echo un vistazo discretamente, todos estaban concentrados en responder el examen, todos menos Kiba, el castaño tenía el mentón apoyado en una mano, era obvio que estaba aburrido.
Kakashi supuso que ninguno de los que estaban allí sabia para que era esa prueba, vio a su colega y buen amigo Yamato que se levantó y fue a entregar el examen. Hatake volvió a fijar su atención en el papel, solo le restaba responder la última pregunta, la numero veinte.
"¿Diga su opinión sobre cada uno de los Kages?"
El ninja copia analizó la pregunta, debía ser la más importante de todas, el albino sabia muy poco sobre las mujeres, pero había aprendido por malas experiencias que a las mujeres les gusta se alabadas.
Kakashi tenía una gran ventaja sobre los demás, sabia para qué era la prueba, él podía con unas simples palabras convertirse en el esposo de Mei Terumi, una mujer tan poderosa como Tsunade-sama.
Que alguien le preguntara a Kakashi si quería tener en su cama a una mujer como ella. Esto ya Naruto se lo había preguntado y Hatake no tenía que pensar nada, "moriré soltero".
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Naruto y Sakura le había ofrecido a Mei su casa mientras tuviera que hacer todas las diligencias respecto al innombrable, era ridículo pero la Kage a pesar de haber asumido su condena no quería que le nombrasen la palabra matrimonio.
—¿Me vas a cortar el pelo?
Sakura observó al rubio, hace dos días habían hecho el amor en el piso y eso no había cambiado el tono distante con que Naruto le hablaba, era un orgulloso, la pelirosada cerró el libro que leía y le dijo.
—¿Me vas a construir el laboratorio que te pedí?
—¿Me vas a contar lo de Sasuke? —preguntó suspicaz.
Sakura hizo un gesto de fastidio —Le pediré al Capitán Yamato que lo construya, eso no será nada para él.
—Pues para mi es más fácil que para él. —replicó ofendido.
Haruno se puso de pie y arrastro una silla hasta el centro de la sala, —siéntate y quiero ese laboratorio hoy mismo.
Naruto sonrió. —¿qué quieres apostar a que lo tengo para el final de la tarde?.